Bancos Centrales de Suiza y Filipinas Emiten Decisiones Contrastantes de Política Monetaria

El Banco Nacional Suizo (BNS) confirmó el 11 de diciembre de 2025 su decisión de mantener la tasa de interés oficial en el 0.00%, consolidando una postura de política monetaria expansiva en un contexto de inflación persistentemente baja. Esta determinación se produjo después de que la inflación general en Suiza cayera a cero por ciento en noviembre de 2025, situándose precisamente en el límite inferior del rango de estabilidad del BNS, definido entre el 0% y el 2%. El presidente del BNS, Martin Schlegel, señaló en la conferencia de prensa posterior que, aunque la inflación reciente fue menor a lo esperado, las presiones inflacionarias a medio plazo se mantuvieron estables respecto a la evaluación previa.

La economía suiza enfrenta desafíos, habiendo registrado una contracción del 0.5% en el tercer trimestre, un factor que la política monetaria busca contrarrestar. El contexto suizo se ve matizado por la reciente resolución comercial con Estados Unidos, que acordó reducir los aranceles adicionales impuestos a productos suizos del 39% al 15%, lo cual se proyecta que alivie el impacto económico en una nación dependiente de las exportaciones. El gobierno suizo proyecta un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del 1.3% para 2025, aunque revisó a la baja la estimación para 2026 al 0.9% debido al efecto de los aranceles estadounidenses. El BNS, manteniendo su tipo en el nivel más bajo entre los principales bancos centrales, reiteró su disposición a intervenir en el mercado de divisas si fuera necesario, dada la fortaleza del franco suizo que presiona la inflación a la baja.

En un movimiento divergente, el Bangko Sentral ng Pilipinas (BSP) aplicó su quinta reducción consecutiva de tipos de interés en la misma fecha, ajustando la tasa de recompra inversa a un día en 25 puntos básicos hasta el 4.50%. Esta flexibilización monetaria busca contrarrestar la desaceleración de la actividad económica, afectada por las repercusiones de un escándalo de corrupción política e infraestructural que impactó el crecimiento del PIB en el tercer trimestre. El gobernador del BSP, Eli Remolona Jr., indicó que este ciclo de flexibilización se aproxima a su fin, pero subrayó la necesidad de medidas fiscales complementarias para mitigar los efectos del escándalo. Esta quinta rebaja, que también redujo la tasa de préstamo de referencia al 5.00% desde el 5.25%, fue anticipada por doce economistas encuestados por The Wall Street Journal como una medida preventiva ante el deterioro económico.

Mientras Suiza se enfoca en desafíos estructurales y la volatilidad del comercio internacional, con su sector financiero recuperado de la quiebra de Credit Suisse en 2023, el enfoque filipino se centra en la reactivación interna mediante la política monetaria. La economía filipina había mostrado un crecimiento del 5.5% en el segundo trimestre de 2025, y la inflación anual había descendido al 0.9% en julio de 2025, el nivel más bajo desde octubre de 2019. La decisión del BSP del 11 de diciembre en Manila se alineó con las expectativas del mercado, siguiendo un reciente recorte de tipos por parte de la Reserva Federal estadounidense, mientras espera una respuesta fiscal a la crisis de gobernanza.