La Administración Trump Anula las Normas de Eficiencia de Combustible CAFE Impuestas por la Era Biden

El miércoles 3 de diciembre de 2025, el presidente Donald Trump formalizó la revocación de los Estándares de Millaje de Combustible Corporativo Promedio (CAFE) que habían sido establecidos por la administración Biden. Esta decisión se presenta como un esfuerzo estratégico para aliviar la carga regulatoria impuesta a la industria automotriz y, consecuentemente, reducir el costo final de los vehículos para los consumidores estadounidenses. El presidente Trump argumentó que las regulaciones previas imponían restricciones excesivamente onerosas a los fabricantes, lo cual, según su perspectiva, había contribuido al encarecimiento de los automóviles, una situación agravada por el mandato previo enfocado en vehículos eléctricos.

El anuncio se realizó durante una ceremonia en el Despacho Oval, a la cual asistieron directivos de Ford, Stellantis y el Secretario de Transporte, Sean P. Duffy. La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) ha presentado nuevas directrices que son notablemente menos estrictas. Si estas nuevas estipulaciones logran su aprobación final, el promedio requerido para la industria se fijará en aproximadamente 34,5 millas por galón (mpg) para el año modelo 2031. Este nuevo umbral representa una anulación directa del objetivo que la administración Biden había fijado, el cual buscaba alcanzar cerca de 50 mpg para ese mismo año.

El Secretario de Transporte, Sean Duffy, enfatizó que las regulaciones anteriores eran “simplemente inalcanzables” y que habían inflado artificialmente los precios de los automóviles nuevos. La administración Trump proyecta que esta nueva propuesta resultará en un ahorro promedio de 1.000 dólares por vehículo nuevo para las familias estadounidenses, sumando un total de 109.000 millones de dólares en ahorros acumulados a lo largo de un quinquenio. Es importante recordar que, en septiembre de 2025, el gobierno de Trump ya había retirado los incentivos fiscales destinados a los vehículos eléctricos, como parte de una revisión más amplia de las políticas medioambientales de su predecesor.

No obstante, los detractores de la medida advierten que esta anulación podría exacerbar la crisis climática, dado que el sector del transporte constituye una fuente principal de emisiones de gases de efecto invernadero en los Estados Unidos. Además, los opositores sostienen que esta acción debilita la competitividad global en la carrera por el desarrollo de tecnologías verdes. Los estándares CAFE, que fueron instaurados por el Congreso en 1975, han mantenido históricamente una estructura dual, aplicando normativas separadas para las camionetas ligeras y los turismos convencionales.

Los directivos de Ford y Stellantis manifestaron su respaldo a la decisión. Antonio Filios, CEO de Stellantis, declaró que las acciones de la administración Trump alinean los parámetros de CAFE con las “condiciones reales del mercado”, permitiendo así ofrecer vehículos a precios más accesibles para los clientes. Cabe destacar que Stellantis había incurrido en el pago de más de 590 millones de dólares en multas desde 2016 por no cumplir con las exigencias de eficiencia previas. La derogación de las normas de la EPA relativas a las emisiones de gases de escape también forma parte de esta reorientación política. Mientras que los estándares de Biden, según datos de la NHTSA, estaban diseñados para generar un ahorro de 23.000 millones de dólares en combustible para los consumidores, la nueva política se centra en garantizar la “libertad de elección” para el comprador.