El presidente argentino, Javier Milei, ha ratificado que su gobierno está inmerso en conversaciones con Estados Unidos con el objetivo de sellar un acuerdo comercial de gran alcance. Este proceso subraya un interés compartido en la expansión del intercambio bilateral, sugiriendo un horizonte de comercio mejorado. Milei puntualizó que la parte estadounidense ha manifestado una firme disposición a ofrecer condiciones comerciales ventajosas a Argentina, lo que se interpreta como una reorientación estratégica de los lazos económicos entre ambas naciones.
Este acercamiento diplomático se sustenta en acciones financieras tangibles de gran calado. El secretario del Tesoro de EE. UU., Scott Bessent, reveló recientemente la colaboración en curso con importantes fondos de inversión e instituciones bancarias para estructurar un fondo significativo de $20 mil millones. Este mecanismo financiero está diseñado específicamente para la adquisición sostenida de deuda soberana argentina, lo que representa un claro voto de confianza en la senda fiscal del país y una medida clave para estabilizar su estructura financiera. Bessent también confirmó que el Tesoro estadounidense ha reanudado la compra de pesos argentinos en el mercado abierto de divisas. Es crucial recordar que esta reactivación de la compra de pesos se produce tras una intervención previa y la culminación de un acuerdo de canje de divisas (swap) por $20 mil millones con el banco central de Argentina.
La intensificación de esta asociación económica de alto nivel se desarrolla en paralelo a una clara dinámica política. El expresidente Donald Trump ha manifestado reiteradamente su apoyo al presidente Milei, enmarcando estas aperturas financieras y comerciales como intrínsecamente ligadas al mandato político actual. Trump ha sido explícito al condicionar el apoyo: si el partido de Milei no logra la victoria en las próximas elecciones de mitad de mandato, Estados Unidos dejaría de destinar recursos y atención al país. El exmandatario afirmó que, de no ser así, ya no "perderían el tiempo con Argentina". Estas cruciales elecciones legislativas de mitad de mandato están programadas para el 26 de octubre.
Estas recientes maniobras financieras se cimentan sobre una base de apoyo económico ya establecida. Informes anteriores ya señalaban que la Corporación Financiera de Desarrollo Internacional de EE. UU. (DFC) había evaluado inversiones en infraestructura y energía limpia dentro de Argentina. El clima actual refleja una decisión mutua de ambas naciones para impulsar vías de crecimiento económico interconectado y estabilidad. Las medidas de respaldo adoptadas por EE. UU. enfatizan el apoyo a las reformas económicas que el gobierno de Milei está implementando, consolidando la confianza en la dirección fiscal elegida.