Ankara, 29 de agosto de 2025 – Turquía ha anunciado hoy la interrupción total de sus relaciones comerciales y económicas con Israel, además del cierre de su espacio aéreo a las aeronaves israelíes. La decisión, comunicada por el Ministro de Asuntos Exteriores turco, Hakan Fidan, responde a las continuas operaciones militares de Israel en Gaza, calificadas por Turquía como genocidio.
Las sanciones abarcan un cese completo del comercio, la prohibición de acceso a los puertos turcos para buques israelíes y la restricción para que los buques turcos naveguen hacia puertos israelíes. Adicionalmente, Turquía no permitirá la entrada a sus puertos a buques portacontenedores que transporten armas y municiones destinadas a Israel. Esta medida representa una escalada significativa en la postura de Ankara frente al conflicto.
El volumen comercial entre Turquía e Israel ascendió a aproximadamente 7.000 millones de dólares en 2023, lo que subraya la considerable interdependencia económica que ahora se ve drásticamente alterada. Las exportaciones turcas a Israel representaron una parte sustancial de este intercambio. Si bien Turquía había restringido previamente el comercio en mayo de 2024, la medida actual implica una ruptura total.
El Presidente Recep Tayyip Erdogan ha sido un crítico vocal de las acciones de Israel en Gaza, llegando a calificar al Primer Ministro Benjamin Netanyahu de "terrorista" en declaraciones anteriores. Turquía también ha buscado vías legales internacionales, presentando una solicitud para unirse al caso de genocidio contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), iniciado por Sudáfrica.
Las implicaciones de estas sanciones son amplias. Para Israel, la interrupción del comercio con Turquía, un socio comercial clave, podría generar presiones económicas. El Banco de Israel ha señalado que el impacto económico de estas medidas ha sido limitado hasta la fecha, gracias a la flexibilidad de su economía abierta y la diversificación de proveedores. Sin embargo, la prohibición total de comercio y el cierre del espacio aéreo podrían tener consecuencias más pronunciadas.
Desde una perspectiva geopolítica, la decisión de Turquía subraya su alineación con la causa palestina y su creciente asertividad como actor regional. Esta postura, sin embargo, podría tensar las relaciones con aliados occidentales. La comunidad internacional observa de cerca estas medidas, que reflejan la profunda división y las complejas dinámicas que rodean el conflicto en Gaza.