En una significativa maniobra diplomática, Portugal ha anunciado oficialmente el reconocimiento del Estado de Palestina, uniéndose a una creciente coalición internacional que aboga por una solución de dos estados para el conflicto israelí-palestino.
La declaración, realizada por el Ministro de Asuntos Exteriores portugués, Paulo Rangel, en Nueva York el 21 de septiembre de 2025, marca un punto de inflexión en el panorama geopolítico, con varias naciones europeas y potencias mundiales alineándose en esta cuestión. La decisión de Portugal, respaldada por una amplia mayoría parlamentaria y la aprobación del gabinete, se produce en un momento de intensificación de los esfuerzos diplomáticos para abordar el conflicto. Rangel enfatizó que este reconocimiento es un paso hacia una paz justa y duradera, al tiempo que reafirmó el derecho de Israel a existir y condenó los actos terroristas de Hamás del 7 de octubre de 2023. La postura de Portugal también incluyó un llamado a la liberación inmediata de los rehenes y a la lucha contra el antisemitismo.
Este acto de Portugal se alinea con movimientos similares de países como el Reino Unido, Canadá y Australia, que también han formalizado su reconocimiento del Estado de Palestina en fechas recientes. Otros países como Francia, Bélgica, Malta y Luxemburgo han expresado intenciones de seguir este camino, reflejando un consenso internacional emergente. Históricamente, más de 150 países ya reconocen la soberanía palestina, una cifra que subraya el amplio apoyo global a la causa palestina.
La decisión de Portugal y sus aliados se produce en un contexto de creciente preocupación por la situación humanitaria en Gaza. Las hostilidades iniciadas tras los ataques de Hamás en octubre de 2023 han resultado en un número significativo de víctimas palestinas; las cifras oficiales indican más de 65.000 muertes y más de 166.000 heridos en la Franja de Gaza como respuesta a los ataques que cobraron aproximadamente 1.200 vidas y resultaron en la toma de más de 250 rehenes.
La respuesta de Israel a estos reconocimientos ha sido de firme oposición. El Primer Ministro Benjamin Netanyahu ha calificado tales movimientos como una recompensa al terrorismo, declarando que la creación de un estado palestino no ocurrirá mientras él esté en el poder y anunciando planes para expandir los asentamientos israelíes en Cisjordania. Por su parte, el Presidente de Israel, Isaac Herzog, ha criticado las decisiones de varios países, argumentando que no contribuyen a un acuerdo entre israelíes y palestinos.
Desde la perspectiva palestina, el reconocimiento por parte de Portugal y otras naciones se considera una confirmación de la falta de soberanía israelí sobre los territorios ocupados y un paso crucial hacia la justicia y la autodeterminación. La comunidad internacional, a través de estas acciones, busca revitalizar el proceso de paz y presionar a Israel para que cese la expansión de asentamientos y se comprometa con una solución de dos estados, un camino que Portugal considera la única vía hacia una paz duradera y equitativa.