Han salido a la luz correos electrónicos privados de Sarah Ferguson, la Duquesa de York, dirigidos a Jeffrey Epstein, condenado por delitos sexuales. Las comunicaciones, obtenidas por The Mail on Sunday, datan de 2011 y muestran una aparente contradicción con sus declaraciones públicas, revelando gratitud y disculpas hacia Epstein, a pesar de haberlo repudiado públicamente.
En un correo electrónico con fecha del 26 de abril de 2011, apenas dos meses después de afirmar públicamente que "nunca más volvería a tener nada que ver con él", la Duquesa se refirió a Epstein como un "amigo constante, generoso y supremo". En el mismo mensaje, expresó su pesar por no haber respondido a un correo anterior, manifestando: "Debo disculparme humildemente ante ti y tu corazón por ello". Otro correo, fechado el 22 de enero de 2011, se dirigía a Epstein como "mi querido, querido amigo Jeffrey" y le agradecía su apoyo financiero durante un período complicado. Ferguson había admitido previamente haber aceptado 15.000 libras de Epstein en marzo de 2011, calificando la asociación como un "enorme error de juicio" y prometiendo devolver el dinero.
Las revelaciones plantean interrogantes sobre la credibilidad de la Duquesa, especialmente considerando sus roles en organizaciones benéficas infantiles y su labor como autora de libros para niños. En marzo de 2011, Ferguson había declarado públicamente su asociación con Epstein, quien ya había sido condenado en 2008 por solicitar prostitución de una menor, como un "enorme error de juicio", y prometió no volver a tener contacto con él. En esa misma entrevista, Ferguson expresó su aversión a la pedofilia y al abuso infantil, calificando su relación con Epstein como un "gigantesco error de juicio" y manifestando su deseo de devolver el dinero recibido.
La defensa de la Duquesa, a través de su portavoz, señala que estos correos se enviaron bajo consejo para "apaciguar" a Epstein, quien había amenazado con emprender acciones legales por difamación tras las declaraciones públicas de Ferguson. Según se desprende de los correos, Ferguson habría estado "paralizada por el miedo" y "postrada en cama por el temor", sintiendo que no quería "herir a Andrew una vez más" y que estaba actuando bajo "miedo abrumador". Se sugirió que Ferguson fue instruida a actuar con la máxima celeridad para salvaguardar su carrera como escritora y filántropa infantil. El portavoz de la Duquesa enfatizó que Ferguson lamenta su asociación pasada con Epstein y que sus "primeros pensamientos están con sus víctimas", añadiendo que, al igual que muchas personas, fue engañada por las "mentiras" de Epstein. La controversia en torno a Epstein, quien falleció en 2019 mientras esperaba juicio, continúa generando interés público en sus asociados y en la transparencia de las figuras públicas.