Desde el 24 hasta el 26 de octubre de 2025, la cuarta edición de Art Basel París se celebrará en el renovado Grand Palais. Este evento está destinado a reafirmar la posición de París como un centro neurálgico europeo fundamental para el arte contemporáneo. La feria atraerá a 206 galerías internacionales, presentando tanto obras maestras consagradas como las creaciones de talentos emergentes, atrayendo a coleccionistas de todos los rincones del planeta. Clément Delepine, director de la feria, destacó que esta entrega representa la primera edición “normal”, dado que el evento se ha asentado completamente en el histórico espacio del Grand Palais.
La arquitectura interna de la feria refleja una aproximación multifacética al mercado del arte. El sector principal, denominado «Galerías», actúa como ancla, exhibiendo piezas de “primer nivel” y lienzos dignos de un museo. Por otro lado, la sección «Emergence» se centra en las nuevas voces y los talentos jóvenes. Finalmente, «Premise» propone proyectos curatoriales audaces, incluyendo en ocasiones trabajos históricos que datan incluso de antes de 1900. Es notable que 63 de las galerías participantes tienen su base en Francia, lo que subraya la vitalidad excepcional del ecosistema artístico local.
El éxito sostenido de Art Basel París está intrínsecamente ligado al fortalecimiento estratégico de la capital francesa como epicentro europeo. Este ascenso se ve impulsado por una legislación fiscal favorable y la migración de actores internacionales que abandonaron Londres tras el Brexit. En el recinto ferial se percibe un ritmo más reflexivo, donde la conversación precede a la adquisición, indicando que el fervor especulativo ha disminuido. Sin embargo, las previsualizaciones estuvieron marcadas por transacciones significativas.
La galería Hauser & Wirth reportó ventas que superaron los 30 millones de dólares, incluyendo la venta de la pintura de Gerhard Richter, «Abstraktes Bild» (1987), por 23 millones de dólares. Este dato evidencia la preferencia de los coleccionistas por maestros probados con peso museístico.
En paralelo a la exposición central, la ciudad se transforma en una vasta plataforma para la creatividad. El programa público se extendió por nueve ubicaciones parisinas icónicas. Entre los acontecimientos más destacados se encuentra la instalación de Harry Nuriev en la Capilla de los Pequeños Agustinos y esculturas monumentales, como la rana Gustavo (Kermit the Frog) inflable de Alex Da Corte en la Place Vendôme. Adicionalmente, en el mismo Grand Palais, se presentó la exposición complementaria «Niki de Saint Phalle, Jean Tinguely, Pontus Hultén», dedicada a su colaboración y que permanecerá abierta hasta enero de 2026.
Art Basel París, que toma el relevo de la feria FIAC de cuarenta años de antigüedad, no solo honra este legado, sino que también establece una dirección contemporánea. Al hacerlo, consolida el papel de la capital francesa como el lugar donde se define y se afirma el futuro del discurso artístico global.
