El Punto Nemo, ubicado en las vastas extensiones del Océano Pacífico Sur, es el lugar más distante de cualquier masa terrestre en nuestro planeta. Sus coordenadas exactas son aproximadamente 48°52′6″ de latitud Sur y 123°23′6″ de longitud Oeste. Este punto de inaccesibilidad oceánica fue calculado en 1992 por el ingeniero croata Hrvoje Lukatela.
Las costas más cercanas al Punto Nemo son la Isla Ducie, Motu Nui cerca de la Isla de Pascua y la Isla Maher en la Antártida, todas a una distancia considerable de unos 2.700 kilómetros. Paradójicamente, los seres humanos más cercanos a este remoto lugar no se encuentran en la Tierra, sino a bordo de la Estación Espacial Internacional, que orbita a unos 400 kilómetros de altitud.
El nombre "Punto Nemo" es un homenaje al Capitán Nemo, personaje de las novelas de Julio Verne, "Veinte mil leguas de viaje submarino" y "La Isla Misteriosa". La fascinación por este punto se extiende a la astronomía, con el asteroide (1640) Nemo, descubierto en 1951, y el cráter Nemo en Caronte, la luna de Plutón, ambos nombrados en honor a la figura literaria.
El asteroide (1640) Nemo, clasificado como un asteroide que cruza la órbita de Marte, tiene un período orbital de aproximadamente 1266 días. El Punto Nemo, más allá de ser un hito geográfico, simboliza la lejanía y la introspección. Su designación como "cementerio de naves espaciales" subraya su rol como destino final de satélites y estaciones espaciales dados de baja, minimizando el impacto en la vida terrestre.
Agencias espaciales como la Agencia Espacial Europea consideran este punto seguro para la reentrada de desechos espaciales debido a su aislamiento y la profundidad del océano en la zona. El Punto Nemo, con su remota ubicación, sigue inspirando la exploración tanto de los océanos como del cosmos.