Arqueólogos de los Servicios Arqueológicos de la Universidad de Leicester (ULAS) han descubierto una extraordinaria evidencia de 2.000 años de actividad humana bajo la plaza del mercado de Leicester. Los hallazgos, realizados durante las excavaciones para la nueva plaza del mercado de la ciudad, incluyen el enterramiento de un infante romano y los restos de un emblemático edificio cívico perdido hace tiempo. La investigación ha arrojado luz sobre la profunda y continua huella de la civilización en este lugar a lo largo de milenios, ofreciendo una ventana sin precedentes a la vida y la evolución de la ciudad.
Entre los hallazgos más conmovedores se encuentra la tumba de un infante romano, sepultado bajo el suelo de una estructura de madera que data de hace casi 1.800 años. Cerca, el equipo descubrió hornos de cerámica romanos, que ofrecen nuevas perspectivas sobre la vida doméstica y la industria en la Leicester romana. Estos hornos son un testimonio de las prácticas artesanales y la organización económica de la época. La presencia de un enterramiento infantil tan antiguo subraya la continuidad de la vida humana y las prácticas funerarias en el asentamiento romano.
Del período medieval, los arqueólogos identificaron las superficies del mercado más antiguas, un pozo revestido de piedra y los restos de una mazmorra. Se cree que esta mazmorra, descrita a mediados del siglo XVI como "una prisión muy vil", formaba parte de la Cámara de Gainsborough, un edificio mencionado por primera vez en registros de 1533. La Cámara de Gainsborough era un edificio cívico de alto estatus que sirvió como sede de procedimientos judiciales, negocios municipales y celebraciones hasta su demolición alrededor de 1748. Sus gruesos muros de piedra, recién descubiertos, resaltan la importancia arquitectónica y cívica del edificio.
El Dr. Gavin Speed, líder de la excavación para ULAS, señaló que, si bien Leicester ha sido objeto de exploración arqueológica, esta área en particular había permanecido intacta hasta ahora. La remodelación de la plaza del mercado brindó una oportunidad única para investigar el sitio, y los descubrimientos han superado las expectativas. Las excavaciones revelaron restos bien conservados de dos edificios romanos; el más antiguo, una estructura de madera bajo la cual se encontró el enterramiento infantil, datado de hace aproximadamente 1.900 años. Un edificio romano posterior, construido en piedra, se erigió directamente sobre la casa de madera anterior. Asociados con esta fase, los arqueólogos descubrieron teselas romanas, cerámica, monedas y joyas, ayudando a reconstruir la vida cotidiana y la economía de la Leicester romana. Se identificaron gruesas capas de suelo del período anglosajón, ofreciendo posibles perspectivas sobre cómo continuó la vida entre los restos de la ciudad romana.
Sorprendentemente, justo debajo de la superficie moderna, se descubrió la plaza del mercado medieval más antigua. Esta consistía en guijarros compactados, cubiertos por limos y sucesivas capas de repavimentación, revelando aproximadamente 800 años de actividad de mercado y rastros de antiguos puestos del mercado medieval preservados como agujeros de postes. Estos hallazgos no solo responden a preguntas de larga data sobre el desarrollo de la plaza del mercado de Leicester, sino que también ofrecen una ventana fascinante a la evolución de la ciudad desde la época romana hasta el período medieval y más allá.
El alcalde de la ciudad, Peter Soulsby, enfatizó la importancia de conocer el pasado de la plaza del mercado antes de su repavimentación, destacando la experiencia de ULAS en revelar rastros dejados por habitantes desde la época romana hasta los victorianos. ULAS continuará trabajando con los contratistas para extraer información del sitio, y se espera que algunos de los notables hallazgos se exhiban públicamente. Se prevé que el sitio del mercado sea repavimentado y reabierto a los comerciantes para finales de 2026. Leicester ha sido escenario de numerosos descubrimientos arqueológicos en los últimos años, incluida la excavación de los restos del rey Ricardo III en 2012 y una sala de culto romana descubierta en 2023. La continua exploración de Leicester revela la profunda estratificación histórica de la ciudad, ofreciendo un tapiz de civilizaciones que se entrelazan y enriquecen nuestra comprensión del pasado humano.