El Zoo de Praga ha implementado una innovadora técnica de alimentación con marionetas de mano para criar a dos crías huérfanas de buitre cabeciamarillo menor, con el objetivo de prevenir la impronta en humanos y garantizar su correcto desarrollo social y reproductivo. Antonín Vaidl, curador de cría de aves del zoo, enfatizó la importancia de este método para evitar problemas de comportamiento a largo plazo, ya que la impronta en humanos puede impedir que las aves interactúen adecuadamente con su propia especie y comprometer su capacidad reproductiva futura. El zoo, una de las tres instituciones europeas que cría esta especie, utiliza marionetas diseñadas para imitar las características de los buitres adultos, como el color amarillo de su cabeza, para que las crías asocien la alimentación con sus congéneres.
La necesidad de esta intervención surgió tras el abandono de los huevos por parte de los padres, indicando que no estaban preparados para el cuidado parental. Una de las crías, nacida hace tres semanas, ya está siendo alimentada con la marioneta, mientras que se espera el nacimiento de otra en los próximos días. El objetivo final es que las crías, una vez crecidas, puedan ser integradas con sus padres y la especie, replicando la interacción parental y asegurando su supervivencia y contribución a los esfuerzos de conservación. Esta técnica, ya empleada con éxito en otras especies como el cálao rinoceronte y la urraca verde de Java, es fundamental para que los buitres desarrollen comportamientos de apareamiento adecuados y una correcta identificación de especie, permitiéndoles prosperar en su entorno natural.