BitMine Immersion Technologies Inc., con sede en Las Vegas, reafirmó su posición como el mayor poseedor corporativo de Ethereum (ETH) a nivel mundial al 18 de octubre de 2025. La compañía, presidida por Tom Lee, ha acumulado una reserva que supera los 3.03 millones de tokens de ETH, una cifra que representa más del 2.5% del suministro circulante total de la criptomoneda. Este movimiento estratégico se ha consolidado tras aprovechar una reciente liquidación del mercado, lo que les permitió adquirir más de 202,000 ETH adicionales, según reportes recientes.
La ambiciosa estrategia de tesorería de BitMine, que busca alcanzar el 5% del suministro total de ETH, fue financiada en parte por una colocación privada de 250 millones de dólares en julio de 2025. Este enfoque agresivo, aunque refleja una fuerte convicción institucional en el activo digital, ha generado tensión en el mercado bursátil de la empresa. Tras el anuncio de planes de emisión de acciones en agosto de 2025, las acciones de BitMine experimentaron una contracción, cerrando el 27 de agosto de 2025 en 46.03 dólares, con una caída cercana al 8%.
El contexto del mercado de activos digitales el 18 de octubre de 2025 mostraba turbulencia, con el ETH cotizando a 3,862.71 dólares, lo que implicaba una caída de 55.14 dólares (1.41%) respecto al cierre anterior, moviéndose en un rango intradiario entre 3,687.13 y 3,934.70 dólares. Esta volatilidad subraya el riesgo inherente a la concentración masiva de capital en un único criptoactivo dentro de un balance corporativo. A pesar de las advertencias sobre la concentración y la gestión del riesgo, el presidente Tom Lee ha expresado confianza, señalando que BitMine se posiciona como un enlace entre Wall Street y la innovación en blockchain.
La acción de BitMine, que también mantiene 192 Bitcoins y una participación en Eightco Holdings, se interpreta como una declaración sobre la reconfiguración de las reservas financieras corporativas. Además, Lee ha indicado que la compañía pronto lanzará una solución de staking para Ethereum, con el objetivo de generar un rendimiento que podría posicionar a la empresa entre las más rentables de Estados Unidos. Este precedente obliga a la comunidad financiera a evaluar si tal acumulación es un catalizador para la estabilidad o un punto de vulnerabilidad sistémica en un entorno regulatorio en desarrollo.