El entusiasta de la longevidad Bryan Johnson aboga por el consumo diario de aceite de oliva virgen extra (AOVE), citando sus beneficios potenciales para el control del peso y el control de la glucosa. Johnson compara favorablemente el AOVE con Ozempic, un medicamento para la regulación del azúcar en la sangre y la pérdida de peso.
Destaca la capacidad del AOVE para estimular la liberación de GLP-1, una hormona que regula el apetito y el azúcar en la sangre. Un estudio demostró que el consumo de AOVE resultó en una pérdida de peso promedio de 2.4 kg durante nueve semanas. Johnson consume una cucharada de AOVE con cada comida.
Johnson señala que el AOVE puede reducir el riesgo de cáncer de mama invasivo en más del 60% y reducir los niveles de azúcar en la sangre en un 60% después de las comidas. También afirma que reduce los niveles de LDL oxidado, combatiendo el daño posterior a las comidas. Si bien no es un reemplazo científicamente probado para Ozempic, el AOVE puede ser una valiosa adición a una dieta y estilo de vida saludables.