En respuesta a las recientes imposiciones arancelarias por parte de la administración estadounidense, Canadá ha ajustado significativamente sus cadenas de suministro. En agosto de 2025, el 81% de las exportaciones canadienses a Estados Unidos cumplían con los requisitos del T-MEC, un notable aumento desde el 56% registrado en mayo. Según Fitch Ratings, esta adaptación demuestra la resiliencia de las empresas canadienses, aunque sectores como el acero, el aluminio y la automoción continúan enfrentando desafíos.
En este contexto de reconfiguración comercial, México se ha consolidado como un aliado estratégico clave para Canadá. La visita programada del Primer Ministro canadiense, Mark Carney, a la Ciudad de México el 18 de septiembre de 2025, subraya esta creciente relación. Carney busca ampliar las relaciones comerciales más allá de Estados Unidos, una estrategia impulsada por la necesidad de sortear las barreras arancelarias. La colaboración entre Canadá y México, históricamente marcada por la competencia, está evolucionando hacia una integración que podría beneficiar a ambas naciones. Un ejemplo de esto es que un producto fabricado en Canadá con componentes mexicanos ahora puede calificar para la exención arancelaria del T-MEC, abriendo oportunidades para que México provea insumos a Canadá y potencialmente desplace a competidores de otros mercados.
La durabilidad de esta nueva alianza comercial dependerá de la continuidad de las exenciones arancelarias para productos que cumplan con el T-MEC y de la próxima revisión del tratado, programada para mediados de 2026. Douglas Porter, economista jefe de BMO, ha señalado que las acciones del gobierno estadounidense han desafiado el espíritu del T-MEC, sugiriendo que Canadá y México podrían necesitar hacer concesiones para preservar el acuerdo. La Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, quien asumió el cargo en octubre de 2024, ha mantenido una postura pragmática, buscando fortalecer la colaboración bilateral en un entorno comercial incierto.
Paralelamente, el gobierno canadiense mantiene un diálogo activo con la Casa Blanca. Una llamada reciente entre el Primer Ministro Carney y el Presidente estadounidense abordó los desafíos comerciales actuales y las oportunidades compartidas, incluyendo la cooperación en seguridad y la situación en Ucrania. La estrategia de Canadá de diversificar sus mercados y fortalecer lazos con México refleja una visión proactiva para navegar las complejidades del comercio internacional y asegurar un crecimiento económico sostenido en un panorama global en constante cambio.