En Alemania, el sistema de apoyo a los refugiados ucranianos se encuentra bajo escrutinio, con propuestas para ajustar los beneficios que reciben. Desde el 1 de junio de 2025, los refugiados ucranianos han estado recibiendo el Bürgergeld, un sistema de ingreso básico acordado el 7 de abril de 2025 entre el gobierno federal y los estados federados. Sin embargo, esta medida ha generado debate sobre su sostenibilidad y equidad.
El Ministro Presidente de Baviera, Markus Söder, propuso el 3 de agosto de 2025 que los refugiados ucranianos llegados después del 1 de abril de 2025 reciban un apoyo reducido, alineado con la Ley de Beneficios para Solicitantes de Asilo. Söder argumenta que Alemania es una excepción en Europa al ofrecer beneficios comparables a los de sus ciudadanos, lo que, según él, desincentiva la búsqueda de empleo, citando que solo uno de cada tres refugiados ucranianos en edad de trabajar está empleado. Esta propuesta se alinea con una tendencia europea de revisión de las condiciones de acogida para refugiados ucranianos. En junio de 2025, la Comisión Europea propuso extender la Directiva de Protección Temporal para los ucranianos desplazados hasta marzo de 2027, buscando proporcionar certeza jurídica y evitar la sobrecarga de los sistemas nacionales de asilo. Desde febrero de 2022, Alemania ha acogido a más de un millón de refugiados ucranianos, con un gasto considerable asociado al Bürgergeld. Las reacciones políticas a la propuesta de Söder han sido diversas, con algunos socios de coalición apoyando el debate y otros considerándola divisiva.