El Audaz Asalto al Louvre: Joyas de Napoleón Robadas Desatan Revisión Crítica de la Seguridad

Editado por: Татьяна Гуринович

La tranquilidad de la mañana del domingo, 19 de octubre de 2025, se vio abruptamente interrumpida por una audaz incursión en el Museo del Louvre de París, un suceso que ha provocado la inmediata revisión de los protocolos de seguridad en uno de los depósitos de arte más importantes del planeta. La Ministra de Cultura, Rachida Dati, confirmó la consumación del robo, haciendo hincapié en que, afortunadamente, no hubo que lamentar víctimas entre el personal o los visitantes. El museo, que alberga un acervo de más de 33.000 obras, se vio obligado a cerrar sus puertas al público durante toda la jornada para facilitar las labores de investigación. Este incidente sin precedentes puso de relieve fallos críticos en la vigilancia de la icónica institución parisina.

Según los informes preliminares de las fuerzas del orden, la operación se llevó a cabo con una rapidez y un nivel de profesionalismo asombrosos. El Ministro del Interior, Laurent Nuñez, estimó que el asalto duró tan solo siete minutos. Los delincuentes, al parecer, se aprovecharon de un punto débil generado por las obras de renovación que se estaban realizando en la fachada del edificio que da al río Sena. Llegaron al lugar en potentes scooters Tmax y, según las primeras hipótesis, utilizaron una plataforma elevadora de construcción o un montacargas para acceder directamente a la Galería Apolo, situada en el segundo piso. Una vez dentro, emplearon, según algunas fuentes, herramientas de corte de alta potencia, como una «amoladora» o pequeñas motosierras, para destrozar las vitrinas de seguridad y acceder a su botín.

El objetivo principal del ataque fue la valiosa colección de joyas que perteneció a Napoleón y a la emperatriz. Se sustrajeron nueve piezas de incalculable valor, entre las que se incluyen un collar, un broche y una tiara. Resulta destacable que la pieza más grande y conocida, el diamante «Regente», con un peso superior a los 140 quilates, permaneció intacta, lo que sugiere una selección muy específica por parte de los ladrones. Las autoridades han manifestado su profundo temor de que las joyas robadas puedan ser fundidas rápidamente para obtener el metal precioso, aunque existe un rayo de esperanza: un objeto sustraído, la corona de la emperatriz Eugenia, fue hallado dañado en las inmediaciones del museo, indicando una posible huida precipitada.

La Fiscalía de París derivó de inmediato el caso a la Brigada de Represión del Bandidismo (BRB), contando con la colaboración de la Oficina Central para la Lucha contra el Tráfico de Bienes Culturales (OCBC). Este grave incidente, que inevitablemente ya se compara con el robo de la «Mona Lisa» en 1911, ha puesto de manifiesto las vulnerabilidades internas del sistema de protección, las cuales pueden ser aprovechadas cuando concurren circunstancias externas, como las obras de construcción. El suceso exige no solo la pronta captura de los responsables, sino también un análisis exhaustivo para la creación de sistemas de seguridad más resilientes y perfeccionados para la salvaguarda del patrimonio cultural de la nación.

Fuentes

  • Deutsche Welle

  • KESQ

  • Israel Hayom

  • Boston 25 News

¿Encontró un error o inexactitud?

Consideraremos sus comentarios lo antes posible.