Ferrari ha presentado su más reciente superdeportivo, el 849 Testarossa, un híbrido enchufable que evoca la esencia del legendario modelo de los años 80 y marca un hito en la electrificación de la marca. Este nuevo modelo se posiciona como el buque insignia de Ferrari, sucediendo al SF90 Stradale.
El 849 Testarossa combina un motor V8 biturbo de 4 litros con tres motores eléctricos, generando una potencia combinada de 1.050 CV. Esta sinergia mecánica le permite alcanzar velocidades superiores a los 330 km/h. Estará disponible en versiones coupé y spider con techo retráctil, con precios de 460.000 € y 500.000 € respectivamente. Las entregas en Europa están previstas para el segundo y tercer trimestre del próximo año, seguidas por las de Estados Unidos aproximadamente tres meses después.
Este lanzamiento se enmarca en la estrategia de Ferrari de diversificar su oferta de motorizaciones, que ya incluye modelos como el híbrido 296 Speciale y el cupé de gasolina Amalfi. Bajo la dirección del CEO Benedetto Vigna, la compañía también prepara su primer vehículo totalmente eléctrico, reafirmando su compromiso con un futuro que integra propulsores de gasolina, híbridos y eléctricos.
El Testarossa original, lanzado en 1984, contaba con un motor bóxer de 12 cilindros y 4.9 litros que producía 390 CV. El diseño del 849 Testarossa rinde un claro tributo estético al modelo de 1984, incorporando además influencias de prototipos de los años 70. El interior ha sido modernizado con una nueva interfaz y un volante rediseñado con controles mecánicos. Para los entusiastas más exigentes, se ofrece un paquete opcional Assetto Fiorano que reduce el peso en 30 kg y mejora la carga aerodinámica.
La hibridación en el segmento de los superdeportivos ha demostrado ser una vía para fusionar el sonido y la potencia de los motores de combustión interna con la eficiencia y el par instantáneo de los motores eléctricos. Ferrari, al igual que otros fabricantes de lujo, está utilizando la tecnología híbrida como un paso crucial para cumplir con las normativas de emisiones sin sacrificar la experiencia de conducción. La estrategia de Ferrari hacia la electrificación es ambiciosa, con el objetivo de que el 80% de su producción sean modelos eléctricos o híbridos para 2030. La compañía está invirtiendo en una nueva fábrica de vehículos eléctricos en Maranello y planea lanzar su primer vehículo totalmente eléctrico en 2026.