El estudio parisino Cinéfrance Studios se ha consolidado rápidamente como un centro neurálgico fundamental para la convergencia y el desarrollo de talentos cinematográficos tanto franceses como japoneses. Fundada en 2018 por David Gauquié y Julien Deris, la compañía ha adoptado un rol esencial en el panorama internacional, actuando activamente como productora delegada, enfocándose intensamente en la coproducción y la identificación temprana de proyectos con potencial transcultural. David Gauquié, cofundador y motor de la empresa, es una figura clave en la materialización de estas iniciativas interculturales únicas. Su compromiso es palpable, habiendo realizado, según los informes disponibles, su 38º viaje a Japón, una cifra que ilustra su profunda dedicación personal a la construcción de esta sólida colaboración bilateral.
El portafolio de Cinéfrance refleja una serie de éxitos internacionales recientes de gran calibre. Entre ellos destaca la finalización en 2024 del esperado *remake* del *thriller* clásico “Serpent's Path” (El camino de la serpiente), una obra original del maestro japonés Kiyoshi Kurosawa. Asimismo, la productora concluyó la ambiciosa película “All of a Sudden” (De repente), dirigida por Ryusuke Hamaguchi. La logística de esta producción fue compleja, requiriendo un rodaje de ocho semanas en la capital francesa, París, seguido de una intensa semana de trabajo en Kioto, y contó con un elenco estelar que incluyó a las aclamadas actrices Virginie Efira y Tao Okamoto.
Además de estos proyectos de alto perfil, Cinéfrance ha extendido su apoyo a la más reciente obra de la directora Naomi Kawase, titulada “Yakushima's Illusion” (La ilusión de Yakushima), la cual ya ha tenido una destacada presentación en el prestigioso Festival de Cine de Locarno. Un caso de estudio particularmente interesante es el proyecto de fantasía “Yoroï”. En esta singular producción, el reconocido músico francés Orelsan (cuyo nombre real es Aurélien Cotentin) se interpreta a sí mismo en la ficción, descubriendo una antigua armadura samurái en una remota y misteriosa región de Japón. El impacto de “Yoroï” fue significativo, asegurando su distribución global a través de Sony Pictures. Este logro no solo validó la visión del estudio, sino que también facilitó su integración con una de las principales distribuidoras mundiales, impulsada en gran medida por la participación de Orelsan.
David Gauquié enfatiza consistentemente que la prioridad operativa de Cinéfrance reside en una elaboración profunda y minuciosa, lo que él describe como un trabajo “a ras de suelo”, para todos los proyectos transculturales. Este método riguroso exige una selección meticulosa de las localizaciones y una inmersión completa en el contexto cultural específico, un proceso que se inicia incluso antes de que se asegure la financiación necesaria. En paralelo a su visión artística y estratégica, el estudio demuestra un compromiso inquebrantable con los principios de la producción cinematográfica responsable. Para ello, implementa activamente prácticas de ecoproducción en todas las fases del desarrollo y la filmación, buscando minimizar de manera efectiva su huella de carbono.
La estrategia de Cinéfrance Studios mira hacia el futuro con una clara intención de invertir en alianzas cinematográficas internacionales de la más alta calidad y prestigio. Entre sus planes a corto y medio plazo se encuentran nuevas y prometedoras colaboraciones con maestros reconocidos del cine mundial, destacando la posible asociación con Hirokazu Kore-eda, el director japonés que se alzó con la Palma de Oro en el Festival de Cannes de 2018 por su aclamada película “Shoplifters” (Un asunto de familia). Esta ambición subraya la dedicación a largo plazo del estudio para fomentar lazos duraderos y producir contenido de excelencia en la industria global del cine.