Imagina un mundo donde los materiales de construcción se pueden ensamblar y desensamblar tan fácilmente como ladrillos LEGO. Esta visión se está convirtiendo en realidad gracias a ingenieros del MIT que han desarrollado un tipo innovador de mampostería reconfigurable hecha de vidrio reciclado impreso en 3D. Anunciado el 19 de septiembre de 2024, esta innovación promete revolucionar la industria de la construcción al minimizar los desechos y reducir las emisiones de carbono.
El concepto de construcción circular tiene como objetivo reutilizar los materiales al final de la vida de un edificio, reduciendo significativamente la necesidad de nuevos recursos y las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas. El equipo, dirigido por la profesora asistente Kaitlyn Becker y el exalumno Michael Stern, ha creado ladrillos de vidrio multilaminados y resistentes, diseñados para encajar, imitando la funcionalidad de los bloques de construcción tradicionales.
En pruebas mecánicas, estos ladrillos de vidrio soportaron presiones comparables al concreto, mostrando su potencial como alternativa viable para fachadas de edificios y paredes internas. "El vidrio es un material altamente reciclable," explica Becker. "Al final de la vida de una estructura, puede ser desensamblado y reformado en nuevas formas, promoviendo un ciclo sostenible en la construcción."
La inspiración para este diseño innovador surgió del Glass Lab del MIT, donde Becker y Stern exploraron inicialmente el arte del soplado de vidrio. Su viaje los llevó al desarrollo de una impresora 3D capaz de imprimir vidrio reciclado fundido, un proyecto que combinó sus pasiones por la ciencia de materiales y el diseño arquitectónico.
Al integrar características interconectables en el diseño del ladrillo, similares a los LEGO, el equipo ha abierto la puerta a nuevas posibilidades arquitectónicas. La forma única en ocho de los ladrillos permite la construcción de paredes con curvatura, mejorando la flexibilidad estética y estructural.
Los siguientes pasos para el equipo incluyen la construcción de estructuras más grandes y autoportantes, con planes para crear pabellones temporales que se puedan reconfigurar para diversos usos. "Estos bloques podrían tener muchas vidas," señala Stern, enfatizando el potencial transformador de su trabajo.
Esta investigación no solo muestra el uso innovador del vidrio en la construcción, sino que también destaca un paso significativo hacia prácticas de construcción sostenibles que podrían redefinir el futuro de la arquitectura.