Un estudio reciente de la Universidad de Ottawa, publicado en marzo de 2025, revela que la inmersión regular en agua fría puede mejorar la salud celular en hombres jóvenes. La investigación, dirigida por Kelli King y el profesor Glen Kenny, involucró a diez hombres jóvenes sanos que se sometieron a inmersiones diarias de una hora en agua a 14°C (57,2°F) durante una semana.
El estudio encontró que después de solo una semana, los participantes mostraron una mejoría en la autofagia, un proceso crítico de reciclaje celular. Los investigadores también observaron indicadores reducidos de apoptosis, o muerte celular, y una disminución de la inflamación. Estos resultados sugieren que la exposición al frío puede fortalecer la capacidad del cuerpo para manejar el estrés a nivel celular, lo que podría prevenir enfermedades y ralentizar el envejecimiento.
Si bien la exposición inicial al frío causó disfunción celular, la exposición repetida condujo a mejores mecanismos de reparación celular. El equipo de investigación planea expandir el estudio para incluir a mujeres y grupos más grandes para determinar si estos beneficios son consistentes en diferentes poblaciones. Este estudio proporciona apoyo científico a la creciente popularidad de la inmersión en agua fría como una práctica de bienestar.