La península de Kamchatka ha experimentado una intensificación de la actividad sísmica, registrando un terremoto de magnitud 6.0 el 10 de agosto de 2025. El sismo se localizó a 215 kilómetros de Petropávlovsk-Kamchatsky, a una profundidad de 33 kilómetros, sin que los residentes reportaran haberlo sentido. La actividad sísmica ha sido elevada durante varios días, con un registro de diez temblores perceptibles y más de 65 réplicas el 3 de agosto, seguido por siete temblores adicionales al día siguiente y 43 réplicas el 9 de agosto. Esta secuencia sísmica se produce tras un devastador terremoto de magnitud 8.8 el 30 de julio de 2025, uno de los más potentes registrados globalmente en décadas y el más fuerte en Kamchatka desde 1952, que generó advertencias de tsunami en todo el Pacífico con olas de hasta 19 metros y causó evacuaciones masivas.
En medio de esta agitación geológica, el volcán Kliuchevskoy entró en erupción, expulsando una columna de ceniza que alcanzó los 11.5 kilómetros de altura y se extendió 460 kilómetros hacia el noreste, lo que llevó a la asignación de un código de peligro de aviación "rojo". La erupción del Kliuchevskoy, el volcán activo más alto de Eurasia, se ha intensificado tras el gran terremoto de finales de julio, con actividad explosiva continua y emisiones de ceniza que han requerido la máxima alerta para la aviación. Se han observado flujos de lava y la posibilidad de flujos de lodo y escombros debido al derretimiento acelerado del glaciar Bogdanovich. Los sismólogos continúan monitoreando la situación, instando a los residentes a mantener la vigilancia. La península de Kamchatka se encuentra en una zona de alta actividad tectónica, parte del Anillo de Fuego del Pacífico, lo que la hace propensa a eventos sísmicos y volcánicos significativos.