Una investigación pionera del Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana (IIAP) ha revelado el considerable potencial farmacéutico y biotecnológico de la biodiversidad amazónica. El estudio examinó 428 muestras vegetales, identificando propiedades bioactivas en el 5% de ellas. La sacha guayaba (*Eugenia patrisii*) emergió como una especie de particular interés debido a sus notables capacidades.
El proyecto, que se extendió de julio de 2024 a agosto de 2025 y contó con el respaldo financiero del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se centró en la creación de un banco de extractos de la biodiversidad amazónica y en la evaluación de su potencial químico y farmacológico. Se analizaron extractos hidroalcohólicos de 214 especies de plantas amazónicas, evaluando su actividad antioxidante y antidiabética. Los resultados fueron alentadores, con las hojas de la sacha guayaba mostrando una alta capacidad antioxidante y un efecto significativo en la inhibición de enzimas clave para el metabolismo de los carbohidratos. En algunos casos, este efecto superó al de medicamentos de referencia ya establecidos, lo que subraya la importancia de la sacha guayaba como candidata principal para futuras investigaciones fitoquímicas y farmacológicas.
El Dr. Gabriel Vargas Arana, líder del proyecto, destacó que la utilización sostenible de la biodiversidad amazónica puede ser un motor para el desarrollo de productos innovadores, la generación de empleo y el establecimiento de acuerdos de reparto de beneficios equitativos con las comunidades locales. El IIAP enfatizó que estos descubrimientos no solo impulsan el avance científico, sino que también abren puertas a oportunidades económicas a través de una gestión responsable de los recursos naturales.
La Amazonía, enfrentando presiones como la deforestación y el cambio climático, encuentra en iniciativas como la del IIAP un camino para la conservación de su rica flora y la promoción de un desarrollo que honra su valor intrínseco. La creación de este banco de extractos representa un recurso invaluable para la investigación futura y la valoración científica de la flora amazónica. Investigaciones previas sobre plantas amazónicas han documentado el uso tradicional de diversas especies para tratar dolencias, validando el enfoque científico actual. La sacha guayaba, al demostrar una actividad enzimática prometedora, se alinea con la tendencia global de buscar soluciones terapéuticas en la naturaleza, impulsada por la creciente demanda de tratamientos más naturales y sostenibles.