El Refugio Biológico Bela Vista (RBBV) en Itaipu Binacional celebra su 40 aniversario, sirviendo como un área vital de conservación para la amenazada Selva Atlántica, uno de los bosques tropicales más amenazados del mundo. Con una extensión de 1,780 hectáreas, este refugio juega un papel crucial en la protección de la diversa flora y fauna.
Los visitantes pueden disfrutar de recorridos guiados gratuitos que incluyen la siembra de semillas de árboles nativos para iniciativas de reforestación. El refugio se conecta con el Bosque de las Tres Fronteras, formando parte del Corredor Ecológico de Santa María, que une el Parque Nacional de Iguaçu y otras reservas protegidas.
Durante los recorridos, los invitados pueden observar diversas especies, incluidos los capibaras, monos y águilas harpías, mientras aprenden sobre la importancia ecológica de la región. La experiencia guiada, que dura aproximadamente dos horas y media, enfatiza la conciencia ambiental y la necesidad de preservar los hábitats naturales.
Los residentes locales han expresado su aprecio por la iniciativa, reconociendo sus beneficios económicos para la comunidad. El programa fomenta un sentido de responsabilidad hacia la naturaleza, animando a los visitantes a reflexionar sobre su impacto en el medio ambiente y a promover esfuerzos de conservación.
A medida que el refugio continúa su misión, sigue siendo un faro de esperanza para los conservacionistas y un recurso vital para educar a las futuras generaciones sobre la importancia de la biodiversidad.