El 24 de septiembre de 2025, Bitcoin (BTC) se cotizaba a $112,242, mostrando un ligero incremento del 0.00102% respecto al cierre anterior. El rango de negociación diario se situó entre $111,538 y $113,319. El mercado ha mostrado volatilidad, con Bitcoin cayendo a mínimos de $111,000 a principios de septiembre, pero recuperándose posteriormente.
La actividad de las "ballenas" de Bitcoin, definidas como tenedores de entre 10 y 10,000 BTC, ha sido notable. Entre el 14 y el 18 de julio de 2025, se registraron entradas de ballenas a los exchanges por valor de $17 mil millones, interpretado como una posible toma de beneficios por parte de grandes tenedores. Esta actividad ha generado preocupación por una potencial presión de venta y mayor volatilidad. De hecho, a finales de septiembre de 2025, se observó una corrección en el precio de Bitcoin, con caídas que lo llevaron brevemente por debajo de los $108,000 a principios de mes. La relación de ballenas en los exchanges ha alcanzado niveles de 2024, un indicador históricamente asociado con correcciones del mercado.
A pesar de la volatilidad a corto plazo, la tendencia estructural del mercado de Bitcoin se mantiene alcista. El promedio móvil de un año ha aumentado a $94,000, sugiriendo fortaleza. La adopción institucional de Bitcoin continúa expandiéndose, con flujos de entrada récord en los ETFs de Bitcoin al contado en EE. UU., que atrajeron $60.6 mil millones en 2025. Michael Saylor, presidente ejecutivo de Strategy, ha señalado que la demanda de Bitcoin por parte de las empresas y los ETFs supera la oferta diaria de los mineros, lo que podría impulsar un repunte a finales de año. Las empresas están adquiriendo 1,755 BTC diarios en 2025, mientras que los ETFs compran 1,430 BTC adicionales diariamente. La acumulación estratégica por parte de las ballenas, como la compra de $200 millones por parte de una ballena individual, refuerza las tendencias alcistas históricas. La transferencia de 40,000 BTC ($4.35 mil millones) a Galaxy Digital en julio de 2025 ejemplifica esta tendencia. La claridad regulatoria en EE. UU., incluida la posible consideración de una Reserva Estratégica de Bitcoin, también está fomentando la confianza institucional.
En resumen, la actividad de las ballenas introduce volatilidad a corto plazo, pero la acumulación de ballenas, la creciente adopción institucional y los fundamentos sólidos del mercado sugieren un potencial de crecimiento continuo. Los inversores observan de cerca estas dinámicas, reconociendo la transición de Bitcoin de un activo especulativo a una piedra angular de las carteras institucionales.