Científicos Hallan Patrones Lingüísticos Similares a los Humanos en Cantos de Aves

Editado por: Vera Mo

Una investigación pionera, publicada el 13 de agosto de 2025 en la revista PLOS Computational Biology, ha revelado que las vocalizaciones de las aves presentan sutiles patrones que guardan sorprendentes similitudes con las reglas fundamentales del lenguaje humano. El estudio, liderado por la Universidad de Manchester en colaboración con el Chester Zoo, sugiere que las aves tienden a utilizar sonidos más breves con mayor frecuencia, un comportamiento que se alinea con la Ley de Abreviación de Zipf (ZLA). Este principio, bien establecido en la comunicación humana, postula que las palabras o sonidos de uso más frecuente tienden a ser más cortos, optimizando así la eficiencia comunicativa.

Para analizar estos patrones, el equipo de investigación desarrolló una metodología innovadora utilizando un paquete de software en R denominado ZLAvian. Este paquete permitió analizar cantos de aves de 11 poblaciones distintas, abarcando 7 especies y obtenidos de la base de datos Bird-DB. Los resultados preliminares indicaron una tendencia general en las aves a preferir sonidos de menor duración. Sin embargo, solo una de las once poblaciones analizadas mostró evidencia robusta de adherencia al patrón de la ZLA, lo que subraya la complejidad y variabilidad inherente a la comunicación aviar.

La observación de tendencias hacia la brevedad en la comunicación no es un fenómeno completamente nuevo. Hace más de tres décadas, Jack P. Hailman ya había notado que los carboneros capinegros (Poecile atricapillus) producían secuencias de llamadas cortas con mayor asiduidad que las largas, aunque sin ajustarse estrictamente a la ZLA. A diferencia de los humanos, que pueden acortar palabras como 'televisión' a 'TV' sin alterar su significado fundamental, incluso modificaciones mínimas en los cantos de las aves pueden distorsionar drásticamente su mensaje. Por ejemplo, en ciertas especies, las hembras evalúan la calidad de los machos basándose en tonos específicos, donde las notas más difíciles de producir a menudo señalan una mejor condición física. Alterar estas notas podría inducir interpretaciones erróneas, impactando directamente en la selección de pareja, lo que podría explicar la inconsistencia observada del principio ZLA en los cantos de las aves.

La Ley de Zipf tiene sus raíces en la Ley del Mínimo Esfuerzo, una tendencia biológica inherente hacia la eficiencia. Si bien la ZLA se aplica consistentemente en el lenguaje humano, la evidencia en el reino animal, incluyendo primates, delfines y murciélagos, sigue siendo limitada. Los investigadores concluyeron que "si la ZLA existe en las aves, los patrones son considerablemente más débiles y menos estables que en el lenguaje humano". Este hallazgo abre nuevas vías para explorar la evolución de la comunicación y la cognición en el mundo natural. Un estudio de 2023 publicado en 'Animal Behaviour' analizó la complejidad de las llamadas de advertencia en suricatas, encontrando que la repetición de sonidos cortos aumentaba la urgencia percibida, sugiriendo que la eficiencia comunicativa en animales puede manifestarse de maneras distintas a la simple abreviación de Zipf.

La investigación enfatiza la necesidad de conjuntos de datos más amplios y un muestreo más diverso para determinar la aplicabilidad de esta ley lingüística a la comunicación aviar. Los hallazgos proporcionan una nueva base para los investigadores que estudian si el principio del mínimo esfuerzo moldea la comunicación animal, aunque la consistencia observada en las aves es notablemente menor que en el lenguaje humano.

Fuentes

  • KOMPAS.com

  • University of Manchester

  • PubMed

¿Encontró un error o inexactitud?

Consideraremos sus comentarios lo antes posible.