El Reino Unido está presenciando un creciente apoyo a los proyectos de energía renovable que incorporan almacenamiento en baterías, crucial para estabilizar la red y lograr los objetivos de descarbonización. La tendencia se destaca por los recientes datos de encuestas y las iniciativas gubernamentales.
El Plan de Acción Energía Limpia 2030 del gobierno del Reino Unido, presentado en diciembre de 2024, tiene como objetivo un aumento significativo de la capacidad de los sistemas de almacenamiento de energía en baterías (BESS). El plan busca un aumento de cinco veces, alcanzando de 23 a 27 gigavatios (GW) para 2030, frente a los 4,5 GW de 2023.
El público y los concejales locales apoyan abrumadoramente los proyectos de almacenamiento en baterías, especialmente en terrenos industriales. Esto se alinea con los esfuerzos del gobierno para eliminar las barreras al despliegue del almacenamiento de energía a largo plazo. El Reino Unido se compromete a lograr una generación de energía limpia para satisfacer la demanda total anual de electricidad para 2030.