FILADELFIA -- La inmigración africana a Estados Unidos ha aumentado significativamente, con muchos estableciéndose en Pennsylvania, a pesar de la elección de Donald Trump. El sheriff Haeda Raa, que huyó de Liberia para escapar de la violencia, llegó a Estados Unidos a finales del año pasado y recibió el consejo de un compañero detenido para mudarse a Filadelfia, donde lo esperaba una comunidad.
Raa ahora reside en el suroeste de Filadelfia, una zona que se está convirtiendo en un centro para inmigrantes africanos. Los organizadores comunitarios tienen como objetivo renombrar parte del vecindario como 'Africatown', inspirándose en enclaves étnicos como Little Italy en Nueva York. Esta iniciativa busca mostrar la cultura africana y proporcionar un sistema de apoyo a los recién llegados.
A pesar de la perspectiva positiva de algunos miembros de la comunidad, existen tensiones sobre la propuesta de Africatown. Los residentes de larga data expresan preocupaciones sobre la identidad del vecindario, y algunos se oponen al cambio de nombre. Terri Powell, una residente de 69 años, declaró: 'Esto no es África... esto es el suroeste de Filadelfia, y nosotros estuvimos aquí primero.'
La elección de Trump ha suscitado temores en las comunidades inmigrantes, especialmente en lo que respecta a posibles deportaciones. Él ha hecho comentarios controvertidos sobre los inmigrantes negros. Sin embargo, los partidarios de Africatown siguen siendo optimistas, creyendo que las protecciones legales mantendrán a muchos inmigrantes a salvo de la deportación.
Filadelfia ha sido un destino para inmigrantes africanos desde la década de 1960, con un aumento notable en las llegadas en los últimos años. Solo en 2023, casi 77,000 migrantes de África ingresaron a Estados Unidos, un aumento dramático de 11,000 en 2022. Este aumento se atribuye a varios factores, incluida la agitación en África y un mejor acceso a la información sobre la migración.
Los líderes comunitarios locales han iniciado proyectos para apoyar a la creciente población africana, incluida la construcción de un centro comunitario de 23 millones de dólares. Mientras algunos residentes dan la bienvenida a la diversidad, otros expresan preocupaciones sobre los rápidos cambios en el carácter de su vecindario.
A medida que la comunidad navega por estos desafíos, muchos inmigrantes africanos expresan su gratitud por las oportunidades que ofrece Filadelfia, viéndola como un lugar de esperanza y estabilidad.