El 19 de junio de 2025, el representante especial de EE. UU., Steve Witkoff, mantuvo varias conversaciones telefónicas con el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Abbas Araghchi. Estas conversaciones tenían como objetivo encontrar una solución diplomática al conflicto en curso entre Israel e Irán.
Las conversaciones marcaron la comunicación directa más sustancial entre las dos naciones desde que comenzaron los ataques israelíes el 13 de junio de 2025. Estos ataques se dirigieron a objetivos iraníes, lo que provocó un ataque de represalia con misiles y drones por parte de Irán contra Israel.
Según diplomáticos que solicitaron el anonimato debido a la sensibilidad del asunto, Araghchi declaró que Teherán no volvería a las negociaciones a menos que Israel cesara los ataques que comenzaron el 13 de junio. Dijeron que las conversaciones incluyeron una breve discusión de una propuesta de EE. UU., transmitida a Irán a finales de mayo, destinada a establecer un consorcio regional para el enriquecimiento de uranio fuera de Irán. Teherán ha rechazado hasta ahora la propuesta.
La comunidad internacional expresó su preocupación por la escalada del conflicto. Rusia advirtió que una intervención militar estadounidense podría desestabilizar la región, lo que podría conducir a una catástrofe nuclear. Irán ha reforzado desde entonces las defensas alrededor de sus principales sitios nucleares y de misiles.
El presidente Donald Trump sugirió la posibilidad de una acción militar contra Irán, indicando que se podría tomar una decisión en una semana. A pesar de los esfuerzos diplomáticos y las medidas defensivas, las tensiones siguen siendo altas, con el riesgo de una mayor escalada e impactos significativos en la estabilidad regional y mundial.