Riad, 1 de diciembre de 2024 – Arabia Saudita está emprendiendo un monumental proyecto para plantar 10 mil millones de árboles en las próximas décadas, con un objetivo inmediato de 600 millones para 2030. Esta iniciativa busca combatir la degradación del suelo y rehabilitar 40 millones de hectáreas de tierras áridas, lo que equivale a 400,000 kilómetros cuadrados.
El proyecto es parte de la respuesta del gobierno saudita al cambio climático, ya que el país enfrenta la perspectiva de temperaturas extremas, que podrían superar los 50 °C durante la mitad del año para 2100. El ambicioso programa de plantación de árboles ha sido descrito por el príncipe heredero Mohammed bin Salman como el más grande de su tipo a nivel mundial.
La conferencia COP16 sobre desertificación que se lleva a cabo en Riad destaca esta iniciativa, mostrando el compromiso de Arabia Saudita con la sostenibilidad ambiental. Los expertos sugieren que, aunque la regeneración natural del suelo es preferible, los beneficios del proyecto de plantación de árboles podrían ser significativos si se ejecuta adecuadamente.
Arabia Saudita ha establecido el Centro Nacional para el Desarrollo de la Cobertura Vegetal y el Control de la Desertificación para supervisar este esfuerzo. En los últimos tres años, se ha informado que se han plantado 95 millones de árboles y arbustos en todo el reino, aunque persisten preocupaciones sobre sus tasas de supervivencia.
Para optimizar el uso del agua para el riego en regiones áridas, Arabia Saudita afirma utilizar principalmente agua reciclada y también ha participado en la siembra de nubes para inducir precipitaciones. Sin embargo, los detalles sobre las inversiones financieras en esta iniciativa siguen siendo poco claros.