A principios de septiembre de 2025, Nepal se vio envuelta en una ola de protestas generalizadas que culminaron con la dimisión del Ministro del Interior y del Primer Ministro. Las manifestaciones, calificadas como la "protesta de la Generación Z", comenzaron el 8 de septiembre de 2025, en Katmandú y otras ciudades. Los jóvenes manifestantes expresaron su profunda frustración por la corrupción gubernamental, el nepotismo y la supresión de la libertad de expresión, detonados por la decisión del gobierno de bloquear 26 plataformas importantes de redes sociales.
Los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad se intensificaron cuando los manifestantes intentaron asaltar el edificio del Parlamento en Katmandú. La policía respondió con gases lacrimógenos, balas de goma y cañones de agua, y según informes de Amnistía Internacional, se utilizó munición real. Estos disturbios resultaron en la trágica muerte de al menos 19 personas y más de 100 heridos.
En respuesta a la creciente crisis, el gobierno levantó la prohibición de las redes sociales el 9 de septiembre de 2025. El Ministro del Interior, Ramesh Lekhak, dimitió, asumiendo la "responsabilidad moral" por los acontecimientos. El Primer Ministro Oli también presentó su dimisión, citando la necesidad de un diálogo pacífico y prometiendo una investigación sobre la violencia, así como compensación para las familias de los fallecidos y tratamiento para los heridos.
La situación en Nepal pone de relieve el delicado equilibrio entre la regulación gubernamental de las plataformas digitales y la preservación de la libertad de expresión. El número de usuarios de redes sociales en Nepal se estimaba en 14,3 millones a principios de 2025, lo que demuestra la importancia de estas plataformas para la comunicación y la movilización social en el país.