Etiopía ha finalizado un acuerdo de reestructuración de deuda con su Comité Oficial de Acreedores, proporcionando más de 3.500 millones de dólares en alivio financiero. Esta medida es crucial para la estabilidad económica del país.
Este acuerdo se produce tras la decisión de Etiopía en 2021 de reestructurar su deuda externa bajo el Marco Común del G20. Analistas económicos señalan que este tipo de acuerdos son vitales para el desarrollo sostenible de las economías en desarrollo, como la etíope.
El gobierno etíope tiene la intención de utilizar este acuerdo para negociar con otros acreedores, incluidos los tenedores de bonos. En América Latina, países como Argentina y Ecuador han enfrentado desafíos similares en la gestión de su deuda externa, lo que subraya la importancia de este tipo de acuerdos.