El 5 de septiembre de 2025, Europa dio un paso monumental en su avance tecnológico con la inauguración oficial del superordenador JUPITER en el Centro de Investigación de Jülich. Este evento contó con la presencia del Canciller alemán Friedrich Merz y el líder estatal de Renania del Norte-Westfalia, Hendrik Wüst.
JUPITER se consolida como el primer sistema de computación exaescala del continente, capaz de procesar más de un quintillón (10^18) de operaciones de punto flotante por segundo. Esta capacidad lo sitúa actualmente como el cuarto superordenador más rápido a nivel mundial y el más rápido de Europa. Construido sobre la plataforma Grace Hopper de NVIDIA, el sistema está diseñado para alcanzar un rendimiento en inteligencia artificial de hasta 90 exaflops, lo que promete multiplicar la velocidad de las simulaciones científicas y el entrenamiento de modelos de IA, abriendo nuevas vías para la investigación y la industria.
Durante la ceremonia, el Canciller Merz enfatizó la importancia estratégica de JUPITER para que Europa pueda acortar distancias con potencias líderes en inteligencia artificial como Estados Unidos y China, reafirmando la capacidad de Alemania y Europa para mantener una posición competitiva en el escenario global. La capacidad de procesamiento de JUPITER es comparable a la de cinco millones de ordenadores portátiles modernos.
Astrid Lambrecht, directora del Centro de Investigación de Jülich, destacó la relevancia de JUPITER en un contexto de creciente demanda energética para la digitalización y la inteligencia artificial, señalando que el sistema demostrará la viabilidad de realizar cálculos de manera eficiente y sostenible. JUPITER opera con "energía verde", lo que lo convierte en uno de los sistemas más eficientes energéticamente del mundo, logrando 60 gigaflops por vatio.
La construcción de JUPITER, que se extendió por dos años, comprende aproximadamente 50 módulos de contenedores distribuidos en más de 2300 metros cuadrados. Se espera que impulse significativamente la investigación científica y las aplicaciones industriales, con un enfoque particular en avances en inteligencia artificial y investigación climática. La inversión en JUPITER subraya el compromiso de Alemania y la Unión Europea con la soberanía tecnológica y la excelencia científica en la era digital.