La reciente campaña publicitaria de American Eagle, protagonizada por la actriz Sydney Sweeney, ha generado debate público debido a la interpretación de su eslogan "Sydney Sweeney has great jeans". Algunos críticos señalan que el juego de palabras entre "genes" y "jeans" podría aludir a teorías de superioridad racial, mientras que otros defienden la campaña como una celebración de la moda y la confianza personal.
En respuesta a las críticas, American Eagle afirmó que la campaña se centra exclusivamente en sus productos de mezclilla y en cómo cada individuo los lleva con confianza. La marca enfatizó que "los jeans geniales le quedan bien a todo el mundo".
La controversia ha tenido repercusiones en el mercado financiero, con fluctuaciones en el valor de las acciones de la empresa tras el lanzamiento del anuncio. Sin embargo, la campaña también ha generado un aumento en las ventas, indicando que la atención mediática ha tenido un impacto positivo en la demanda de sus productos.
Este caso refleja cómo las campañas publicitarias pueden ser interpretadas de diversas maneras por el público, subrayando la importancia de considerar las sensibilidades culturales y sociales al diseñar mensajes publicitarios.