El calabacín es una verdura muy versátil, perfecta para comidas rápidas y guarniciones. Con la llegada del verano y la abundancia de productos frescos, es el momento ideal para probar recetas sencillas y deliciosas.
Aquí tienes cinco recetas fáciles para enriquecer tus comidas de verano.
1. Calabacín a la plancha con hierbas: Corta el calabacín en rodajas de aproximadamente 0,5 cm de grosor. Aliña con aceite de oliva, sal, pimienta y tus hierbas favoritas (como orégano, albahaca o tomillo). Cocina a la plancha a fuego medio durante 2-3 minutos por cada lado, o hasta que estén tiernos y ligeramente dorados.
2. Calabacín al horno: Corta el calabacín por la mitad o en cuartos a lo largo. Rocía con aceite de oliva, sazona con sal, pimienta y ajo en polvo. Hornea a 190°C (375°F) durante 20-25 minutos, o hasta que estén tiernos.
3. Chips de calabacín crujientes: Corta el calabacín en rodajas finas. Mezcla con aceite de oliva, sal, pimienta y pan rallado (o panko para un extra de crujiente). Hornea a 200°C (400°F) durante 15-20 minutos, volteando a la mitad, hasta que estén dorados y crujientes.
4. Tortilla de calabacín y queso: Sofríe calabacín cortado en cubitos en una sartén con un poco de aceite de oliva hasta que se ablande. Bate huevos con sal y pimienta. Vierte los huevos sobre el calabacín, espolvorea con queso rallado (como cheddar o mozzarella) y cocina hasta que los huevos cuajen.
5. Pasta con calabacín y parmesano: Sofríe calabacín en rodajas en aceite de oliva hasta que se ablande. Añade la pasta cocida y mezcla. Sazona con sal, pimienta y una generosa cantidad de queso parmesano rallado.
¡Buen provecho! Estas sencillas recetas son perfectas para disfrutar de la frescura del verano y experimentar con sabores deliciosos. ¡Anímate a probarlas!