Un evento cósmico significativo se aproxima a la Tierra, con la posibilidad de que la aurora boreal sea visible en hasta 18 estados de Estados Unidos entre el 1 y el 2 de septiembre de 2025. Este fenómeno, que extenderá su danza de colores mucho más al sur de lo habitual, es el resultado de una potente eyección de masa coronal (CME) originada por la región activa AR 4199, la cual experimentó una erupción el 30 de agosto de 2025.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), a través de su Centro de Predicción del Clima Espacial (SWPC), anticipa la llegada de esta CME a la Tierra a finales del 1 de septiembre, extendiéndose hasta las primeras horas del 2 de septiembre (UTC). Se espera que este evento desencadene tormentas geomagnéticas de nivel G2 (moderado) a G3 (fuerte), con una posibilidad de alcanzar el nivel G4 (severo). La NOAA clasifica las tormentas geomagnéticas en una escala de G1 (menor) a G5 (extrema), y las tormentas G3 pueden llevar las auroras a latitudes tan al sur como Illinois, Nueva York y Oregón.
La región activa AR 4199 emitió una erupción solar de larga duración de clase M2.7 el 30 de agosto de 2025. Este evento generó una CME con una eyección de halo completo, que se dirige hacia la Tierra. Existe la posibilidad de una "CME caníbal", donde una eyección más rápida alcanza y se fusiona con una anterior, lo que podría aumentar la energía y la imprevisibilidad de la tormenta solar. La actividad auroral podría ser visible en estados como Alaska, Washington, Oregón, Idaho, Montana, Wyoming, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Nebraska, Minnesota, Iowa, Wisconsin, Illinois, Michigan, Nueva York, Nuevo Hampshire, Vermont y Maine.
Las áreas más cercanas a la frontera con Canadá tendrán la mayor probabilidad de avistamiento. Sin embargo, la extensión inusual de la órbita auroral podría permitir que millones de personas en el norte e incluso en el centro de EE. UU. sean testigos de este fenómeno. El período de observación óptimo se prevé entre las 2 a.m. y las 5 a.m. EDT del 2 de septiembre de 2025. Para maximizar las posibilidades de disfrutar de este espectáculo, se recomienda buscar ubicaciones con cielos despejados y oscuros, alejados de la contaminación lumínica de las ciudades.
Las cámaras de teléfonos inteligentes y las cámaras digitales podrían capturar la luz incluso si es tenue para el ojo humano, ya que sus sensores acumulan la luz de manera más efectiva. Estos eventos, si bien son una manifestación de la creciente actividad solar del ciclo solar 25, también pueden causar interrupciones en las comunicaciones por radio y fluctuaciones menores en las redes eléctricas. La NOAA advierte que las tormentas G3 pueden causar problemas intermitentes de navegación satelital y de radio de baja frecuencia, además de afectar las comunicaciones por radio HF.
Para obtener la información más precisa y actualizada, se aconseja consultar las predicciones del Centro de Predicción del Clima Espacial de la NOAA y los pronósticos meteorológicos locales. La alineación de estos factores, desde la actividad solar hasta las condiciones atmosféricas locales, determinará la magnificencia de la experiencia. Este evento subraya la constante interacción entre nuestro planeta y la dinámica del Sol.