"Estamos tomando un material que todos pensaban que era eléctricamente inerte y le estamos dando una nueva vida", dice Zijing (Jackie) Zhang, estudiante de doctorado en la Universidad de Michigan, destacando un descubrimiento innovador. Investigadores de la Universidad de Michigan han descubierto que una variante de silicona recientemente descubierta actúa como un semiconductor, desafiando la creencia arraigada de que las siliconas son exclusivamente aislantes. Este avance, anunciado recientemente, podría revolucionar la electrónica flexible.
Tradicionalmente, las siliconas han sido conocidas por sus propiedades aislantes, lo que las hace útiles en dispositivos biomédicos y recubrimientos electrónicos. Sin embargo, esta nueva silicona semiconductora ofrece el potencial para pantallas flexibles, sensores portátiles e incluso ropa que cambia de color. La clave reside en la disposición única de los enlaces silicio-oxígeno dentro del copolímero de silicona.
El equipo descubrió que estructuras de reticulación específicas en un copolímero de silicona permitían que los electrones se movieran a través de los enlaces Si-O-Si. Esto crea una vía para que fluya la carga eléctrica. Al controlar la longitud de la cadena del copolímero, los investigadores también pueden ajustar el color de la silicona, abriendo las puertas a dispositivos electrónicos vibrantes y personalizables.
Richard Laine, profesor de la U-M, prevé que el material permita "nuevos tipos de pantallas planas, fotovoltaica flexible, sensores portátiles o incluso ropa que pueda mostrar diferentes patrones o imágenes". El descubrimiento promete un futuro donde la electrónica no solo sea funcional sino también flexible, colorida y se integre a la perfección en nuestras vidas.