El 8 de enero de 2025, en Darmstadt, Alemania, Merck KGaA presentó avances revolucionarios en inteligencia artificial (IA) destinados a transformar el descubrimiento de fármacos y el desarrollo de materiales semiconductores. Belén Garijo, CEO de la empresa, enfatizó el profundo impacto que la IA tendrá en las industrias, afirmando: "Nos hemos estado preparando para su llegada durante cuatro años."
El enfoque innovador de Merck se centra en mejorar la investigación biofarmacéutica y la medicina personalizada. Ashwini Ghogare, responsable de IA y automatización para el descubrimiento de fármacos, explicó que la empresa busca reducir el tiempo y los costos asociados con los ensayos clínicos, al tiempo que aumenta sus tasas de éxito. La compañía ha desarrollado dos plataformas de IA propias: Aiddison y Catalexis.
Aiddison, o AI-Enabled Drug Discovery Solution, utiliza modelos de IA generativa entrenados con más de tres décadas de datos de I+D farmacéutica para identificar y optimizar nuevas moléculas de medicamentos. Esta plataforma ofrece a los clientes acceso a bibliotecas químicas virtuales que contienen más de 64 mil millones de moléculas, agilizando así el proceso de desarrollo de fármacos.
Catalexis ayuda a seleccionar rápidamente los catalizadores adecuados para las reacciones químicas. Al integrar catalizadores físicos con software impulsado por IA, la plataforma minimiza las extensas pruebas manuales generalmente requeridas en la selección de catalizadores, lo que mejora significativamente la eficiencia de los recursos.
Más allá de los productos farmacéuticos, Merck aplica IA para optimizar los materiales semiconductores existentes y desarrollar nuevos compuestos para chips de próxima generación. La demanda de chips más pequeños y potentes está en aumento, con aplicaciones en computadoras y teléfonos inteligentes, especialmente aquellos que utilizan IA.
La empresa señaló que las estructuras dentro de estos chips pueden ser hasta 20,000 veces más pequeñas que un cabello humano, lo que requiere el uso de longitudes de onda ultravioleta extremas (EUV) para su producción. El desarrollo de nuevas mezclas de materiales, que puede costar alrededor de 10,000 dólares por prueba, se acelera a través de la IA, mejorando la rentabilidad.
La estrategia de Merck implica un enfoque colaborativo, con expertos en IA trabajando en estrecha colaboración con equipos de TI para maximizar las sinergias en sus sectores farmacéutico, electrónico y de ciencias de la vida. La compañía ha comprometido un plan de inversión de 3 mil millones de euros hasta 2025 para impulsar su crecimiento en estos campos, incluyendo el establecimiento de centros tecnológicos en Shanghái y Singapur para mejorar las soluciones digitales para sus clientes.
A medida que Merck continúa empujando los límites de la innovación, la integración de la IA en sus procesos promete revolucionar el panorama del desarrollo de fármacos y la fabricación de semiconductores.