En agosto de 2025, Matt Olson, propietario de Door County Adventure Rafting, descubrió el largamente perdido naufragio del Frank D. Barker frente a la costa de Door County, Wisconsin. Olson, mientras exploraba sitios cerca de Rowleys Bay, notó una anomalía en imágenes satelitales que identificó como un naufragio sumergido.
El Frank D. Barker, construido en 1867, se hundió en 1887 tras encallar en un afloramiento de piedra caliza en medio de condiciones de niebla. La embarcación de 137 pies de eslora yace a 24 pies de profundidad entre los dos brazos de Barker Shoal, al sur del Parque Estatal de Newport. El buque se dirigía a Escanaba, Michigan, para recoger una carga de mineral de hierro cuando el mal tiempo lo desvió de su curso. A pesar de los intentos de rescate, el barco fue declarado una pérdida total, valorado en $8,000 en ese momento, lo que equivale a más de $250,000 en dólares actuales.
Olson, un residente de Door County con pasión por la historia marítima, ha informado previamente de otros naufragios a la Sociedad Histórica de Wisconsin, incluyendo el Grey Eagle y el Sunshine. Su descubrimiento del Frank D. Barker se suma a la rica herencia marítima de la región.
El equipo de arqueología marítima de la Sociedad Histórica de Wisconsin está trabajando para asignar fondos para una encuesta arqueológica el próximo año, con el fin de documentar y registrar aún más el sitio del naufragio. Esta encuesta permitiría que el sitio sea elegible para su futura inclusión en el Registro Nacional de Lugares Históricos. Las leyes estatales y federales protegen este naufragio, y los buzos no pueden remover artefactos o estructuras al visitar el sitio.
El naufragio del Frank D. Barker se encuentra en un área del Lago Michigan cerca de Rowleys Bay, un lugar que se cree que dio nombre al bajío conocido como Barker Shoal. La Sociedad Histórica de Wisconsin ha destacado que el Frank D. Barker es un tipo de embarcación única en los Grandes Lagos, diseñada para el transporte de grano. El barco fue construido por Simon G. Johnson en Clayton, Nueva York, y en su viaje de regreso traía carbón de los puertos del Lago Erie para alimentar fábricas y hogares del Medio Oeste.
El descubrimiento de Olson es significativo, ya que el paradero exacto del Barker se había perdido durante más de un siglo, a pesar de varios intentos de salvamento en 1887 y 1888. Tamara Thomsen, arqueóloga marítima de la Sociedad Histórica de Wisconsin, expresó su entusiasmo por la identificación del pecio y agradeció la aguda observación de Olson para documentar este capítulo de la historia marítima de Wisconsin.