Arkeofili, una organización arqueológica en Turquía, ha anunciado los diez descubrimientos arqueológicos más importantes de 2024, destacando hallazgos significativos que iluminan civilizaciones antiguas.
Entre los descubrimientos notables se encuentra un sitio de entierro en Çemka Höyük, Mardin, donde se encontró a una mujer que se cree que era chaman, de entre 25 y 30 años, enterrada con un cráneo de buey salvaje, junto con otros restos de animales. Esta extraordinaria práctica funeraria sugiere una conexión con las creencias antiguas sobre el mundo espiritual.
En Şanlıurfa, se descubrió una habitación llena de cráneos en el sitio de Sefertepe, que data del período neolítico. La habitación contenía 22 cráneos, lo que indica que fueron exhibidos en estructuras especiales durante un tiempo, reflejando las costumbres funerarias de esa época.
En Kumluca, Antalya, se descubrió un puñal de bronce de 3,600 años con remaches de plata bajo el agua, vinculado a la civilización minoica. Este hallazgo mejora la comprensión de las rutas comerciales y los intercambios culturales en el Mediterráneo.
Una estatua monumental de basalto, que pesa aproximadamente una tonelada, fue excavada en Van, atribuida a la civilización urartiana. La estatua, que se cree que representa una figura divina, está actualmente en proceso de restauración.
En la antigua ciudad de Notion, İzmir, los arqueólogos encontraron una olla que contenía monedas de oro del Imperio Persa, que se cree que fueron escondidas durante una ocupación militar en el siglo V a.C.
Una cabeza de mármol de Zeus, que mide 66 cm, fue descubierta cerca del Templo de Afrodita en Afrodisias, que data del siglo II o III d.C. Este artefacto se cree que fue parte de una estructura arquitectónica.
En Kırıkkale, se descifró una tablilla de arcilla que data del reinado del rey hitita Tuthaliya II, que detalla una invasión extranjera y sus efectos devastadores en las ciudades hititas.
Excavaciones en Boncuklu Tarla en Mardin revelaron más de 100 piezas de joyería utilizadas para perforaciones corporales, proporcionando evidencia de prácticas tempranas de modificación corporal.
En Çatalhöyük, Konya, se encontraron restos de pan que datan de aproximadamente 8,600 años en un antiguo horno, lo que indica prácticas de panadería tempranas.
Finalmente, en Niğde, se descubrieron cráneos decorados de individuos de entre 15 y 40 años, así como de un niño, que muestran las antiguas costumbres funerarias y el uso de pigmentos para la decoración.