El telescopio espacial James Webb (JWST) ha detectado cinco galaxias que probablemente se formaron hace solo 200 millones de años después del Big Bang, clasificándolas entre las galaxias más antiguas conocidas. Los investigadores anunciaron sus hallazgos el 26 de noviembre de 2024 en una base de datos de preimpresiones, aunque los resultados aún no han sido revisados por pares.
Si observaciones posteriores confirman la hipótesis de los científicos, estas galaxias antiguas podrían proporcionar información crucial sobre la formación de galaxias y la evolución de la materia en el universo.
Según los investigadores, estas primeras galaxias habían estado fuera del alcance de observaciones anteriores durante décadas. El JWST ha mejorado significativamente la capacidad de estudiar estas estructuras cósmicas tempranas.
Anteriormente, los cosmólogos estimaban que los primeros cúmulos de estrellas comenzaron a fusionarse y formarse en galaxias unos pocos cientos de millones de años después del Big Bang. Las teorías actuales sugieren que alrededor de 1 a 2 mil millones de años después del inicio del universo, las proto-galaxias tempranas alcanzaron un estado de desarrollo, evolucionando hacia galaxias enanas que luego se fusionaron para formar galaxias más grandes, como la nuestra.
Determinar el momento exacto y la velocidad de estos procesos sigue siendo un desafío debido a la débil luz de estas galaxias y la expansión del universo que estira sus longitudes de onda.
A diferencia de su predecesor, el telescopio espacial Hubble, el JWST puede detectar luz en el espectro infrarrojo, lo que le permite observar las primeras etapas del desarrollo del universo.