Un potente tifón, clasificado actualmente entre las categorías 12 y 13 con ráfagas que alcanzan la categoría 16, se está intensificando y moviéndose lentamente hacia la costa de Vietnam. La velocidad reducida de la tormenta, de aproximadamente 15 km/h, le permite acumular más energía, aumentando su potencial de fortalecimiento. Se espera que toque tierra entre Thanh Hoa y el norte de Quang Tri.
Las autoridades vietnamitas han tomado medidas de preparación significativas, incluyendo la evacuación de cientos de miles de personas. El tifón Kajiki, el quinto de la temporada, se ha intensificado rápidamente en menos de 48 horas, pasando de depresión tropical a un tifón de categoría 13-14. Las condiciones favorables en el Mar del Este sugieren una mayor intensificación. Las autoridades han emitido directivas urgentes, movilizado recursos y coordinado esfuerzos para garantizar la seguridad humana y la protección de la propiedad. Se han emitido alertas de desastre natural de nivel 4 para provincias costeras y de nivel 3-4 tierra adentro, destacando el alto potencial de víctimas y daños severos a la infraestructura.
Se pronostican lluvias intensas a muy intensas desde la noche del 24 hasta finales del 27 de agosto en la zona de Thanh Hoa a Thua Thien Hue, con precipitaciones totales de entre 150 y 300 mm, superando los 600 mm en algunos puntos. En las zonas costeras, se esperan vientos de nivel 7-9 desde la tarde del domingo, intensificándose a niveles 10-11, con ráfagas de hasta nivel 16 cerca del ojo del tifón. El tifón Kajiki, con vientos máximos sostenidos de 165 km/h, se espera que toque tierra en el centro de Vietnam hacia el mediodía del lunes, con vientos de hasta 155 km/h.
Las autoridades de las provincias de Thanh Hóa, Quang Tri, Hue y Da Nang han evacuado a casi 587.000 personas. Se ha prohibido la pesca en varias provincias y unas 60.000 embarcaciones con casi 249.000 tripulantes han sido alertadas o guiadas a puerto. El director del Centro Nacional de Previsión Hidro-Meteorológica ha advertido de que las condiciones en el mar y en tierra son "extremadamente peligrosas e inseguras para todas las actividades".