El estado de Tabasco, México, marcó un hito trascendental en su proceso de revitalización ecológica el 12 de octubre de 2025. Durante la jornada anual del Día de Reforestación, impulsada por el Gobierno estatal, se superaron con creces las metas establecidas. Este esfuerzo sin precedentes culminó con la plantación de 2.6 millones de árboles, una cifra que se erige como testimonio contundente del compromiso profundo de la región con la restauración de su ciclo natural.
Esta campaña masiva fue orquestada bajo la dirección del gobernador Javier May Rodríguez, logrando un esfuerzo mancomunado que congregó a instituciones educativas, el sector empresarial y la sociedad civil en general. Gracias a esta iniciativa, Tabasco se consolida como el único estado en México que implementa un programa de reforestación de esta magnitud, diseñado específicamente para contrarrestar activamente los efectos del cambio climático global.
Un efecto colateral positivo de esta iniciativa ha sido la revitalización de viveros estatales que se encontraban inactivos. Estos centros ahora desempeñan un papel crucial, proveyendo más de 170 especies de plantas, entre ellas variedades raras y endémicas. Estos ejemplares son esenciales para la recuperación de zonas de protección, la mejora de espacios urbanos y la rehabilitación de tierras que han sufrido degradación, inyectando nueva vida a la biodiversidad local.
Estas acciones representan una respuesta directa y necesaria a las pérdidas ecológicas históricas que ha sufrido la región. Las otrora exuberantes selvas de Tabasco, conocidas históricamente como la «Puerta al Mundo Maya», vieron su extensión reducida en más del 95% a causa de la expansión agrícola y la industria petrolera. Este proceso de restauración en curso demuestra que, a pesar de las profundas alteraciones históricas del paisaje regional, la voluntad colectiva tiene el poder de revertir la situación y modificar el destino ambiental.
Los esfuerzos ambientales de Tabasco se inscriben dentro de una tendencia nacional más amplia. Mientras este estado concentra sus recursos en la cobertura forestal, otras entidades, como la Ciudad de México, están activamente enfocadas en la gestión de residuos y la mejora de la calidad del aire, incluyendo planes para la recuperación de gas de vertedero para generar energía limpia. Adicionalmente, la sostenibilidad regional recibe apoyo internacional; por ejemplo, una asociación estratégica con el Reino Unido capacita a agricultores locales en métodos agrotécnicos avanzados. Esta colaboración busca disminuir la huella de carbono mediante la promoción de cultivos menos intensivos en carbono, como el cacao.
Las campañas anuales de reforestación están programadas para asegurar la continuidad de esta labor de recuperación del manto verde. Este proceso trasciende la mera corrección de los errores del pasado; constituye una elección consciente por un futuro donde la prosperidad se alcanza mediante el restablecimiento del equilibrio ecológico. Cada plántula sembrada se convierte en la expresión tangible de una nueva responsabilidad hacia la tierra, involucrando a cada residente del estado en la construcción activa de su entorno natural y sostenible.