Pune, India, ha experimentado un significativo descenso del 27% en la biodiversidad de caracoles en las últimas seis décadas, atribuible principalmente a la rápida urbanización, según un estudio reciente.
Realizado por investigadores de Pune, Karnataka y una universidad canadiense, el estudio destaca la grave amenaza que este descenso representa para el ecosistema acuático en la región metropolitana de Pune. La pérdida de diversidad de caracoles se espera que tenga un efecto en cascada sobre las poblaciones de peces de agua dulce.
Publicada en la revista Biodiversity, la investigación identifica el aumento de los niveles de contaminación del agua como una causa principal de la extinción de los gastropodos locales, que se encuentran típicamente en arroyos y ríos. El escurrimiento urbano, la afluencia de aguas residuales y el vertido de basura son contribuyentes significativos a esta tendencia alarmante.
Los investigadores muestrearon caracoles de 24 ubicaciones urbanas en Pune y Pimpri-Chinchwad entre 2021 y 2023, registrando solo 16 especies de ocho familias, un descenso desde las 22 especies observadas en encuestas anteriores de 1963 y 1979. Notablemente, el 41% de las especies observadas fueron clasificadas como raras, siendo Racesina luteola la más abundante.
El estudio también encontró tres especies de caracoles invasores, incluida Physella acuta, que se encontraron principalmente en el río Mutha. La mayor riqueza de especies se observó en el río Pavana.
La creciente actividad humana ha llevado a la destrucción de hábitats y a la contaminación, causando un declive en caracoles especialistas de hábitat como Paludomus sp. y Paracrostoma sp., mientras que especies generalistas como Racesina luteola prosperan en aguas contaminadas.
Los investigadores enfatizan que los gastropodos sirven como indicadores de la salud del hábitat, haciendo que su preservación sea crucial para mantener el equilibrio del ecosistema. La gestión efectiva de la contaminación es esencial para mitigar los impactos de la urbanización en la biodiversidad de aguas dulces.
Además, el estudio advierte que la urbanización ha introducido especies no nativas, que representan una amenaza seria para la flora y fauna locales. Se necesitan campañas de concienciación para prevenir la liberación de especies invasoras, como el caracol dorado, en cuerpos de agua naturales.