El cocodrilo del Orinoco, una especie en peligro crítico de extinción nativa de Venezuela y Colombia, se enfrenta a graves amenazas. Su población se ha reducido a menos de 100 en estado salvaje debido a la caza furtiva y la caza.
Se están llevando a cabo esfuerzos de conservación liderados por el Grupo de Especialistas en Cocodrilos de Venezuela. Crían cocodrilos jóvenes en cautiverio, recolectando huevos y liberando juveniles en áreas protegidas como el río Capanaparo.
Los desafíos incluyen la escasez de personal de conservación y las comunidades locales que cazan cocodrilos para alimentarse. Para combatir esto, los conservacionistas se involucran con las comunidades, ofreciendo incentivos y promoviendo prácticas sostenibles.
La colaboración internacional también es crucial. En 2023, se enviaron siete cocodrilos al zoológico de cocodrilos de Dinamarca, produciendo más de 170 crías. Estas crías fueron devueltas a Venezuela para impulsar la población nativa.
A pesar de las dificultades, los conservacionistas siguen dedicados a la supervivencia del cocodrilo del Orinoco. Sus esfuerzos, combinados con el apoyo internacional y la participación de la comunidad, ofrecen esperanza para el futuro de esta especie icónica.