Una investigación reciente ha destacado la preocupante relación entre las floraciones algales nocivas (HABs) y la mortalidad de ballenas en aguas de EE. UU. Cuando las algas florecen, producen neurotoxinas que pueden afectar gravemente la vida marina, incluidas las ballenas. Mientras que la exposición aguda puede ser mortal, la exposición crónica también puede hacer que las ballenas sean vulnerables a colisiones con barcos y enredos en equipos de pesca.
El estudio, publicado en Frontiers in Marine Science, analizó datos de las costas este y oeste, revelando que los años con HABs significativas a menudo coincidían con un aumento en las lesiones y muertes de ballenas atribuidas a actividades humanas. Esta correlación fue particularmente fuerte en la costa del Pacífico.
Los investigadores Greg Silber y Katy Silber encontraron que las neurotoxinas de las algas podrían desorientar a las ballenas, haciéndolas menos capaces de evadir peligros como barcos y equipos de pesca. El estudio sugiere que modelos de predicción mejorados para las HABs podrían ayudar a mitigar estos riesgos al informar sobre las prácticas de pesca y navegación.
A pesar del aumento en las poblaciones de ballenas, muchas especies siguen en peligro, enfrentando amenazas por actividades humanas. Los autores enfatizan la necesidad de más investigación y mejor monitoreo para proteger a estas majestuosas criaturas de los riesgos acumulativos que representan las HABs.