El ether (ETH), la criptomoneda nativa de la red Ethereum, ha superado la marca de los $4,000 por primera vez en ocho meses, demostrando una notable fortaleza en el mercado. Al 11 de agosto de 2025, el ETH ha registrado un aumento del 29% en lo que va del año, superando ligeramente el 28% de ganancias del Bitcoin en el mismo período. Este repunte se atribuye en gran medida a un creciente interés institucional y a flujos de entrada récord en los fondos cotizados en bolsa (ETFs) basados en Ethereum.
Julio de 2025 fue un mes excepcional para los ETFs de Ether al contado, que experimentaron entradas netas de $5.43 mil millones, un asombroso incremento del 369% en comparación con junio. Esta tendencia positiva ha continuado con una racha de 20 días consecutivos de entradas. BlackRock, a través de su iShares Ethereum Trust (ETHA), lideró estas entradas con casi $576 millones en las últimas dos semanas, representando el 71% del total. Fidelity, con su Wise Origin Ether Fund (FETH), también atrajo flujos significativos, sumando $123 millones. Estos datos subrayan una creciente confianza por parte de los inversores institucionales en Ethereum como un activo digital clave.
El impulso alcista del ether también está vinculado a un sentimiento general de mercado positivo y a avances tecnológicos. La actualización Pectra, implementada en mayo de 2025, ha mejorado la funcionalidad y el atractivo de la red. Esta actualización, que combinó las propuestas de mejora de Ethereum (EIPs) de Praga y Electra, es la más grande en la historia de la red, introduciendo mejoras en la escalabilidad, la eficiencia de las transacciones y la experiencia del usuario, incluyendo la abstracción de cuentas a través de EIP-7702 y el aumento del límite de participación de los validadores a 2,048 ETH.
El rendimiento del ether en 2025 ha sido particularmente impresionante, superando al Bitcoin en ganancias interanuales. Este cambio de tendencia, que comenzó a principios de agosto, refleja tanto una estrategia de "recuperación" como un renovado optimismo de los inversores en el ecosistema de Ethereum. Factores como el entusiasmo en torno a las stablecoins, muchas de las cuales operan en la blockchain de Ethereum, y la acumulación de ETH por parte de grandes entidades y organizaciones autónomas descentralizadas (DAOs) también contribuyen a la reducción de la oferta circulante y a la presión alcista sobre el precio.
Analistas señalan que la creciente adopción institucional, evidenciada por los flujos de ETFs y las adquisiciones a gran escala, está fortaleciendo la narrativa alcista en torno a Ethereum. La utilidad de Ethereum como plataforma para finanzas descentralizadas (DeFi), NFTs y aplicaciones descentralizadas (dApps), junto con su mecanismo deflacionario introducido por la actualización EIP-1559, posiciona a ETH no solo como un activo especulativo, sino como una infraestructura digital fundamental. A medida que el mercado de criptomonedas madura, la capacidad de Ethereum para competir con el rol de reserva de valor del Bitcoin y su infraestructura programable atraen cada vez más a inversores tradicionales, sugiriendo un futuro prometedor para el activo digital.