Elon Musk, el jefe de Tesla y Neuralink, predice que los implantes cerebrales eventualmente reemplazarán a los teléfonos inteligentes. Él visualiza un futuro donde las personas puedan usar sus pensamientos para conectarse a Internet y controlar dispositivos, eliminando la necesidad de pantallas o teclados.
Neuralink logró un hito en enero de 2024 cuando implantó su dispositivo en un humano por primera vez. Noland Arbaugh, un tetrapléjico de 29 años, recibió el implante Neuralink, llamado "Telepathy", que le permitió controlar un cursor de computadora y jugar juegos como el ajedrez usando solo sus pensamientos.
Musk cree que a medida que avance la tecnología Neuralink, estos implantes serán más ampliamente adoptados, lo que podría hacer que los teléfonos inteligentes queden obsoletos. Si bien la tecnología aún se encuentra en sus primeras etapas, Neuralink está buscando actualmente un segundo participante para los ensayos clínicos. La compañía tiene como objetivo desarrollar interfaces cerebro-computadora que puedan restaurar una variedad de problemas relacionados con el cerebro, incluida la restauración de la vista y la funcionalidad de las extremidades, la solución de la pérdida de memoria e incluso la cura de la depresión a través de un implante de chip cerebral.