Ciudad de México, 9 de diciembre de 2024 – El fabricante chino de vehículos eléctricos BYD ha abierto un concesionario improvisado en un barrio obrero de la Ciudad de México, vendiendo su modelo Dolphin Mini a aproximadamente 18,000 dólares, significativamente más barato que los modelos comparables en EE. UU.
A medida que fabricantes de automóviles chinos como BYD, Chery, Geely y SAIC establecen presencia en México, enfrentan aranceles de EE. UU. que efectivamente impiden su entrada al mercado estadounidense. No obstante, la ambición de expandirse a América del Norte es evidente, con planes de fábricas potenciales en México dirigidas al mercado latinoamericano.
El Dolphin Mini de BYD está ganando tracción entre los consumidores, con ventas que, según se informa, ocurren tan rápido como los vehículos llegan de China. A pesar de los desafíos para registrar estos vehículos en EE. UU. debido a problemas de cumplimiento de seguridad, el optimismo se mantiene alto entre los concesionarios locales.
Los analistas de la industria señalan que los fabricantes de automóviles chinos son cada vez más competitivos en calidad y tecnología, con una presencia notable en México, donde ahora representan el 9% de las ventas de autos nuevos, frente a prácticamente nada hace cinco años.
General Motors ha reportado una pérdida proyectada de más de 5,000 millones de dólares debido a la reestructuración en China, destacando la presión competitiva de los fabricantes chinos. Mientras tanto, el gobierno mexicano ha aumentado recientemente los aranceles sobre los vehículos importados, reflejando preocupaciones sobre la creciente cuota de mercado de las marcas chinas.