Cascais, Portugal, se ha consolidado como un destino codiciado, con su playa de Santa Marta emergiendo como una joya secreta que cautiva a viajeros y fotógrafos. Ubicada dentro del Parque Natural Sintra-Cascais, esta cala apartada ha ganado popularidad viral en redes sociales, especialmente en TikTok, gracias a su belleza singular, aguas cristalinas y un aura de descubrimiento.
El acceso a la playa de Santa Marta es sencillo desde Lisboa, con un pintoresco viaje en tren de aproximadamente 40 minutos hasta Cascais. Desde la estación, un agradable paseo de 15 minutos, pasando por el Palacio de la Ciudadela y el Faro de Santa Marta, conduce directamente a la costa. Para quienes prefieren viajar en coche, hay aparcamiento disponible en las cercanías, y los servicios de transporte local conectan eficientemente a los visitantes con esta ensenada casi secreta.
La playa es célebre por sus impresionantes formaciones de piedra caliza, conocidas como "Lapiás Costeros", esculpidas por milenios de erosión. Estas dramáticas características geológicas crean un paisaje visualmente impactante y muy fotogénico, ideal para los amantes de la naturaleza y los fotógrafos. Junto a la playa se alza el Faro de Santa Marta, integrado en el histórico Fuerte de Santa Marta, que ahora funciona como museo. Este sitio ofrece a los visitantes una ventana al patrimonio histórico y cultural de la región, destacando la importancia estratégica del área a lo largo de los siglos.
El Faro de Santa Marta, construido en 1868 y restaurado para convertirse en museo en 2007, es un testimonio del patrimonio marítimo de Portugal. Combina su función de señalización costera con espacios expositivos sobre la historia de los faros portugueses, incluyendo lentes de Fresnel y detalles sobre la vida de los fareros, ofreciendo una perspectiva única de esta profesión.
Más allá de la playa de Santa Marta, Cascais ofrece una gran variedad de atractivos. La Marina es un centro vibrante con cafés frente al mar y actividades náuticas. El Museo Condes de Castro Guimarães, un palacete del siglo XIX fundado en 1931, exhibe arte nacional e internacional, muebles, porcelana y joyas, además de una notable biblioteca con un manuscrito iluminado de 1505.
Otro ícono local es el Palacio de la Ciudadela, que ahora sirve como centro cultural con exposiciones y eventos. Para los amantes de la naturaleza, la Boca do Inferno presenta un espectáculo natural espectacular; las olas del Atlántico que rompen contra sus acantilados crean una escena salvaje y fotogénica, perfecta para disfrutar de una puesta de sol inolvidable. Este lugar, conocido como la "Boca del Infierno", es una formación rocosa natural donde las olas del mar chocan contra los acantilados, produciendo un ruido formidable.
Cascais atrae cada vez más no solo a turistas en busca de sol y relajación, sino también a aquellos que valoran una alta calidad de vida, seguridad y proximidad a Lisboa. Sus playas, paseos marítimos, carriles bici y creciente oferta cultural hacen de este enclave costero una opción ideal para familias y trabajadores remotos. Con una renovada atención mediática, la playa de Santa Marta y Cascais consolidan su estatus como uno de los destinos más codiciados de la Península Ibérica, un verdadero secreto a voces a un paso de Lisboa.