A medida que se acerca la temporada navideña, diversas organizaciones están lanzando iniciativas globales destinadas a proporcionar apoyo a comunidades vulnerables. Destacada entre ellas, World Vision anima a realizar donaciones que pueden transformar vidas a través del acceso a agua limpia, educación y recursos de salud. La organización enfatiza que los regalos pueden mejorar significativamente las condiciones de vida de los niños afectados por conflictos y desastres.
Educo ofrece una gama de 27 regalos solidarios, incluyendo apoyo para niños impactados por las recientes inundaciones en Valencia. Donaciones de 40 euros financiarán sesiones de apoyo psicosocial para niños traumatizados, mientras que 60 euros proporcionarán materiales educativos a escuelas y organizaciones comunitarias.
En India, por 25 euros, las familias pueden recibir gallinas para obtener proteínas y generar ingresos, mientras que en Nicaragua, 39 euros pueden proporcionar un lechón a mujeres víctimas de violencia de género, ayudando así a su independencia económica.
CEAR ha lanzado un mercado en línea con regalos solidarios como libros, arte y artículos de moda, cuyos beneficios van a apoyar los derechos de los refugiados. Bajo el lema 'Contigo somos refugio', las marcas participantes contribuyen a la inclusión y derechos de los refugiados.
Además, la empresa española de calzado miMaO ha lanzado pulseras solidarias artesanales para ayudar a niños con cáncer. Un porcentaje de las ventas financiará regalos navideños para estos niños y apoyará un campamento internacional donde podrán participar en actividades junto a sus hermanos.
La Fundación Juan XXIII elabora cada año más de 120,000 cestas de Navidad, promoviendo la inclusión social para personas con discapacidades intelectuales a través de su centro de empleo especial. Además, la Coordinadora Estatal de Comercio Justo anima al público a explorar opciones de Comercio Justo, que garantizan condiciones laborales dignas y prohíben el trabajo infantil.
En 2023, las ventas de Comercio Justo en España superaron los 156 millones de euros, reflejando un creciente compromiso con el consumo ético durante la temporada festiva.