Un juez federal ha ordenado a la administración Trump que restablezca todos los puestos y el apoyo financiero a Voice of America (VOA) y otras organizaciones de noticias financiadas por Estados Unidos.
El fallo establece que las acciones anteriores para desmantelar la VOA violaron tanto la ley como la Constitución.
Más de 1.300 empleados de la VOA, incluidos aproximadamente 1.000 periodistas, fueron puestos en licencia tras una orden del presidente Donald Trump.
La Casa Blanca había acusado previamente a la emisora de ser "anti-Trump" y "radical".
VOA se estableció durante la Segunda Guerra Mundial para contrarrestar la propaganda nazi y desde entonces se ha convertido en un importante medio de comunicación mundial.
El fallo destaca que, debido a los recortes, "VOA no está informando las noticias por primera vez en sus 80 años de existencia".